La Guardia Civil ha detenido a tres personas como supuestos autores de un delito contra la propiedad industrial, ya que tras realizar registros en once naves de un polígono de Numancia de la Sagra (Toledo) se han intervenido 72.100 cartuchos de tinta de impresora valorados en 1.200.000 euros.

Los detenidos, dos hombres y una mujer, de nacionalidad china y de entre 36 y 37 años, importaban estos productos vía marítima desde China y Taiwán, para comercializarlos en España y diversos países europeos, tal y como ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

Para realizar estas actividades ilícitas, empresas constituidas en España importaban y comercializaban, en España y otros países de Europa, cartuchos de tinta para impresoras que infringían las patentes.

Este comercio se realizaba a través de una página de Internet, registrada a nombre de la principal sociedad investigada, ubicada en un polígono industrial de Numancia de la Sagra.

Dicha sociedad era administrada por tres ciudadanos chinos, que estaban relacionados con otras 17 empresas de Madrid y Toledo, quienes para enmascarar su volumen de negocios y actividades, cambiaban continuamente de cargo dentro de cada empresa, llegando a causar baja en unas para, en el mismo acto, darse de alta en otras con la misma sede social y ubicación física, aunque con otra denominación.

El constante trasiego de personas y vehículos nacionales y extranjeros en las naves de estas empresas, alquiladas y sin logotipo de empresa o en las que figuraba el rótulo de la anteriormente instalada, dio como resultado la identificación en Holanda de un camión que descargó, en dos empresas de este país, unos 50.000 cartuchos de tinta ilegales.

Estos cartuchos fueron remitidos por la Guardia Civil a la sede de la multinacional informática ubicada en Estados Unidos para su peritaje, que dio como resultado la infracción en una de las patentes concedida por la Oficina Europea de Patentes y validada en España.

El envío de estos productos se hacía por vía marítima desde varias ciudades de China y Taiwán hasta el puerto de Valencia y una vez allí eran transportados por carretera hasta Numancia de la Sagra, desde donde, una vez manipulados y clasificados por modelos, eran distribuidos a nivel nacional e internacional.

Estas empresas de distribución de cartuchos de tinta falsificados tenía filiales y representantes en países de Europa como Alemania, Principado de Andorra, Francia, Gran Bretaña, Holanda, Hungría, Italia, Polonia y Portugal y tenían una bolsa de casi 100 clientes en cada uno de ellos y unos 140 más en España.

Con este entramado empresarial, se intentaba evitar la trazabilidad del dinero procedente de sus actividades.

En el marco de esta operación, denominada "Fake", la Guardia Civil registró 11 naves en Numancia de la Sagra e intervino 72.100 cartuchos de tinta falsificados de varias marcas comerciales, numerosa documentación relativa al comercio interior y exterior de los productos, 16.800 euros en metálico y varios equipos y soportes informáticos.

Los cartuchos intervenidos habrían causado a la multinacional informática unas pérdidas de más de 2 millones de euros.

Entre la información obtenida, también se encontró un listado de 243 empresas en Francia, 92 en Italia y 22 en Holanda, susceptibles de comercializar productos distribuidos por las empresas matrices españolas, aportándose información sobre algunas otras empresas en Portugal.

Además, fruto de la información facilitada, hasta la fecha se han incautado 5.841 cartuchos de tinta falsificados en Polonia y Holanda.