Atada de patas y con la boca cerrada con una brida para que no pudiera ladrar. Así encontraron a una perra podenca los miembros de la asociación dedicada a la protección de animales en Almería, concretamente en la zona de Níjar.

En una publicación en la red social Facebook, Pupekas explica que "tras recibir un aviso de auxilio nos encontramos con un panorama tremendo. Una podenca a la que ataron las patas, para que no pudiera huir, y la boca para que no pudiera ladrar y pedir ayuda. Le esperaba una muerte horrible".

La asociación detalla que "con el calor que hace no sabemos cómo sigue viva. Su cuerpo estaba ardiendo y ella sin fuerzas casi inconsciente. Esperanza, que así la hemos llamado, ha sido trasladada de urgencias al veterinario, donde al ser examinada parece que no hace mucho ha estado de parto. Se encontraba al borde de la muerte y deshidratada al máximo. Esperamos que todo vaya bien para esta pequeña. Cuando esté recuperada necesita un buen hogar".

La perra, a la que la asociación ha dado el nombre de Esperanza, se encuentra ya fuera de peligro, aunque tiene erliquia y está en tratamiento. La asociación busca ahora un hogar para ella. Quienes puedan estar interesados pueden ponerse en contacto con la asociación a través del correo pupekas@gmail.com