O sea que «España va demasiado bien». Usted supera al Aznar de sus buenos tiempos aunque según el expresidente, España va ahora demasiado mal por culpa de Rajoy, su hombre en La Moncloa. ¿Me puede explicar psicológicamente este batiburrillo?

El que diga que en España van las cosas tan mal es que es un poco neurótico. España va demasiado bien porque tenemos de todo. Nunca ha habido tanta abundancia en la historia de la Humanidad y nunca nos hemos quejado tanto.

Usted se ha pasado mil pueblos al afirmar que El Chicle, el asesino de Diana Quer, es un enfermo que necesita ser tratado con un «amor sanador».

Y a lo mejor no puede ser curado pero debemos intentarlo con ese «amor sanador» alejado de la rabia, la ira y el rencor. Mientras tanto tiene que estar apartado de la sociedad porque es un peligro pero habrá que investigar el origen de su maldad.

¿Necesita «amor sanador» también la asesina del niño Gabriel?

Sí. El Chicle y Ana Julia necesitan el «amor sanador» para ser curados pero de momento tienen que estar encerrados. de contenidos.

¿Qué respuesta espera del Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña ante las numerosas denuncias formuladas contra usted a través de las redes sociales por su forma de analizar la violencia machista?

Me es indiferente, no necesito esa ayuda. Es muy importante para la salud mental entender que es imposible tener la aprobación de todo el mundo. Hasta Santa Teresa de Jesús, que ya en vida era considerada una santa, estuvo a punto de ser ajusticiada por la Inquisición. Hagas lo que hagas en esta vida te van a criticar por diablillo o por santurrón. Aquí no se libra ni Dios.

Supongo que lo que usted pretendía era provocar cuando dijo en RTVE en 2015 que aunque Hitler estaba muy loco lo que necesitaba eran «rayos de amor a tope» porque «su fondo potencial era maravilloso».

Es lo que decía Gandhi que fue contemporáneo de Hitler. Este pensamiento se basa en el concepto de aceptación incondicional de los demás que supone partir de la base de que todo el mundo es bueno por naturaleza aunque muchas veces nos volvemos locos en el camino. Pensando así te libras del rencor.

¿Qué nos vuelve locos en el camino?

Ser víctimas de abusos y no reciclar lo sucedido con esos abusos. Los abusados se suelen convertir en abusadores. Seguro que eso fue lo que le pasó a Hitler.

¿Hay que castigar igual a El Chicle que a los corruptos de cuello blanco?

A todos hay que tratarles igual. Hay que investigar para descubrir la curación de su psicopatía. Tratarles especialmente mal es irracional y lo único que se logra es el embrutecimiento de uno mismo.

Nuestro sistema escolar está totalmente equivocado, según usted. ¿Cómo cambiarlo para que los niños aprendan disfrutando?

El aprendizaje tiene que ser voluntario y debe poner el acento de los fracasos en el profesor y no en el alumno. Habría que examinar a los profesores más que a los estudiantes. Todos nacemos con una increíble voluntad de saber y de alcanzar la excelencia y eso es algo que ha olvidado el sistema educativo.

¿Por qué la sensación de que nos falta algo nos conduce a la ansiedad y el desánimo?

Si te faltara algo de verdad sería frustrante pero lo que nos pasa en estos momentos es que no nos falta de nada, nos sobra de todo, y construimos ficciones sin darnos cuenta de la abundancia que tenemos. El problema de la infelicidad es que nos negamos tozudamente a ser felices y eso es lo más absurdo del mundo.

Deme por favor una receta para eliminar los ataques de ansiedad.

Hay que enfrentarse sin miedo al miedo de una forma ordenada. Y sobre todo, no hay que tomar benzodiacepinas que son la nueva adicción del siglo XXI cuyos camellos son los médicos.

¿Cómo se enfrenta uno al pánico ordenadamente?

Con ayuda especializada en psicología conductual. Tienes que tomar la decisión radical de que lo vas a superar cueste lo que cueste. Hablar solo con los amigos no sirve de nada en estas situaciones.

¿Resulta fácil liberarse del estrés para sentirnos mejor y rendir más?

Podemos conseguirlo si consideramos todas las tareas de nuestra vida como retos para lograr algo bueno en vez de enquistarnos en encontrar problemas. La vida es una sucesión incalculable de problemas pero hay que verlos como oportunidades para hacer algo bueno por los demás.

¿Son el agua y una comida frugal diaria todo lo que necesitamos para sentirnos bien?

Eso es lo que dicen todos los científicos, menos el hombre común que se empeña en meterse otras ideas en la cabeza.

Si sentirse feliz depende de nuestra mente, me dará igual estar en una fiesta que en una prisión, si puedo controlarla. ¿Es así?

Totalmente y cuando uno llega a ese convencimiento está muy cerca de Gandhi y de Santa Teresa de Jesús. Pensar así te hace fuerte.

¿Tiene usted alguna fórmula eficaz para desterrar los complejos y acabar con nuestros miedos?

Sí. Deja de quejarte de una puñetera vez y aprecia lo que te rodea. Con esta fórmula todo te irá bien.

Convénzame de que una adversidad puede ser una oportunidad para mejorar mi calidad de vida.

Las adversidades te dan la oportunidad de liberarte de lo que te tenía esclavizado. ¡Cuántas mujeres a las que dejan sus maridos sienten primero un tremendo disgusto y después se ven liberadas!

¿No hay nada tan terrible como para preocuparme por ello?

Nada. Cualquier día caerá un mega-meteorito en la Tierra. Si eso no es terrible cósmicamente, ¿hay algo que lo sea más?

¿Quién tiene en su opinión más mérito en la lucha contra la adversidad: San Francisco de Asís o el científico Stephen Hawking que acaba de morir pero que sufrió con insultante optimismo la enfermedad degenerativa ELA?

Los dos. San Francisco de Asís con ELA habría sido igual de feliz y los dos pensaban lo mismo que yo respecto al «amor sanador» para personas como El Chicle y Ana Julia.

¿Por qué me tengo que amigar con la muerte?

Porque es un hecho natural, fundamental, y tan hermoso como un nacimiento. La inmortalidad que ahora persiguen algunos sería espantosa. Solo el hombre enfermo no ve la belleza de la naturaleza. Además, si lo pudieras evitar€

¿Cómo debo reaccionar cuando muere un ser querido?

Brindando por su legado y sabiendo que dentro de nada te vas a reunir con ese ser allá donde esté. La gente que peor lleva la muerte es laque vive en la ficción de la inmortalidad.