Una joven de 20 años falleció en la madrugada de ayer en Puerto Real (Cádiz) tras recibir varios impactos de bala en su propio domicilio, y otros dos familiares resultaron heridos por los disparos.

Casi a la misma hora, en otra calle del mismo municipio, un militar de la reserva recibía un disparo de escopeta en la arteria femoral a la altura del muslo.

El asalto a la vivienda donde murió la mujer se produjo pasada la medianoche, en la calle Zurraque. Dos hombres armados con escopetas de caza irrumpieron en la vivienda y efectuaron hasta once disparos, según la investigación policial. El hermano de la víctima, de 22 años de edad, y una mujer de 65 años, resultaron heridos y fueron evacuados de urgencia al hospital de Puerto Real, mientras la Policía Nacional peinaba esta zona de viviendas rurales a la búsqueda de testigos, pruebas o el rastro de los dos autores de los disparos.

Casi simultáneamente, en la calle Colibrí, se producía otro tiroteo. Un hombre de 48 años recibió un disparo de escopeta en el muslo. Fue atendido por los agentes de seguridad alrededor de las 1.30 horas de la madrugada. El hombre fue trasladado de inmediato al centro hospitalario, donde se recupera favorablemente.

Este ciudadano se encontraba en casa, tumbado en el sofá cuando escuchó disparos en el exterior. Cuando salió a la calle para comprobar qué sucedía le dispararon en la pierna. Pese a estar malherido, logró llegar hasta una cabina de teléfono y pidió socorro a su hermana, quien a su vez alertó a las autoridades de lo ocurrido.

La joven fallecida durante el tiroteo en su propio domicilio pertenecía a una familia humilde y tenía una hija de escasos meses de edad. El tiroteo en esta vivienda no guarda relación con los disparos efectuados al militar de una calle cercana.

Ajuste de cuentas. La Policía cree uno de los tiroteos podría estar relacionado con un ajuste de cuentas por tráfico de drogas, dado que en una de las fincas se localizaron cultivos de cáñamo. Si bien los agentes no han especificado si se trata de la vivienda donde falleció la mujer, o en la del militar.

La familia de la víctima mortal niega que haya sido un ajuste de cuentas, como sospecha la Policía, y afirma que creen que se ha tratado de un robo. Los familiares aseguraron a Efe que creen que el móvil ha sido el robo, porque antes del tiroteo los presuntos autores, dos jóvenes que huyeron en un vehículo de color oscuro, entraron en otra vivienda familiar -que estaba vacía en ese momento porque sus moradores estaban en una verbena - y robaron 3.000 euros y todas las joyas. Hasta ahora no ha habido arrestos, y la Policía mantiene abiertas todas las líneas de investigación, sin descartar que el móvil sea un ajuste de cuentas.