Manuel Charlín Gama, de 78 años de edad y patriarca del clan de los Charlines, abandonó este sábado el Centro Penitenciario de A Lama (Pontevedra) a las 8.25 horas, tras cumplir dos décadas de condena. Minutos antes había llegado uno de sus nietos conduciendo un automóvil, mientras en el exterior del recinto varios reporteros gráficos aguardaban, desde horas antes, la salida del patriarca.

Aprovechando que dentro del aparcamiento se encontraba un camión de recogida de residuos, el familiar que recogió a Manuel Charlín estacionó el turismo delante del anterior, para dificultar a la prensa gráfica que captara el momento de la salida. Tras acceder al edificio por primera vez, el joven salió con dos bultos empaquetados que guardó en el automóvil.

Después de volver al interior del centro, salió nuevamente portando una bolsa negra y una muleta. A su lado caminaba Manuel Charlín Gama, con la cabeza cubierta con un gorro y abrigado. Ambos entraron en el vehículo y abandonaron la prisión con las ventanillas del coche subidas y sin hacer ninguna declaración.

Charlín Gama abandonó la prisión en virtud del mandamiento de libertad aprobado por la Audiencia Nacional por el que «tiene licenciamiento definitivo» por la nueva doctrina del Tribunal Constitucional sobre el cumplimiento de las penas, que posibilita la acumulación cuando se cumplen dos o mas condenas.

La abogada de Manuel Charlín, Bárbara Royo García, en un comunicado, ha ironizado este sábado con el momento «casual» en que «se ha decidido proceder contra miembros de la familia Charlín, cuando estaban a punto de convertirse en personas libres», en alusión a la Operación Repesca desarrollada a principios de mes en la que el propio Charlín Gama, junto con su mujer y otra hija, que está en prisión, está imputado y en la que cuatro hijos y dos nietas fueron detenidos, según la Policía.

La representante legal de Manuel Charlín considera «nulas» las posibilidades «materiales» de que éste haya participado en la Operación Repesca, argumentando que durante el tiempo de reclusión tanto sus comunicaciones como su correspondencia estuvieron intervenidas y que estuvo «controlado en todo momento»