La Delegación del Gobierno en Baleares ha informado de que la Guardia Civil ha detenido a un hombre que, a falta de una identificación definitiva, podría ser Alejandro de Abarca, presunto autor del asesinato de la joven rumana Ana Niculai que apareció calcinada el pasado lunes en el maletero de su coche.

La detención se ha producido esta mañana y por el momento no se ha informado del lugar donde se ha producido el arresto.

Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado habían establecido un dispositivo especial de vigilancia para evitar que el presunto asesino escapara de Mallorca, al tiempo que especialistas en retratos robot llegaron de Madrid para colaborar en la operación.

Los agentes trabajaban con la descripción física del presunto asesino: la de un hombre bajito, de metro y medio, con el pelo rapado y que lleva un gran tatuaje en uno de sus brazos.

Una joven a la que se le averió el viernes su motocicleta interpuso una denuncia porque un hombre de estas mismas características físicas intentó secuestrarla.

El cadáver de Ana Niculai, de 25 años, apareció el pasado lunes por la noche carbonizado y maniatado en el maletero del coche de su novio, un Audi A-4, en el Camí de S'Amarador de Muro. La autopsia concluyó que la mujer murió antes de que ardiera el vehículo.

La búsqueda de Abarca comenzó tras interrogar al novio de la fallecida, que quedó en libertad, y cuando se dio aviso de que el lunes Abarca, tras pasar el fin de semana en libertad, no regresó al centro de reinserción social donde cumplía pena.