La Guardia Civil y los Bomberos de Torrevieja hallaron ayer por la tarde los cuerpos sin vida de un hombre y una mujer en el interior de una vivienda. Fue en un primer piso situado en la calle Bella Antonia, del barrio Nueva Torrevieja. El aviso se recibió sobre las 19 horas, por parte de un hijo de la mujer fallecida, que no había podido contactar con ella desde hacía semanas.

Los bomberos recibieron permiso judicial para acceder a la vivienda. En este caso, pudieron hacerlo desde una ventana, para evitar forzar la puerta. Las fuerzas de seguridad encontraron ambos cuerpos en el salón de la vivienda. Según fuentes consultadas por este diario, la mujer de 63 años se encontraba en avanzado estado de descomposición, sentada en un sofá, desnuda. El hombre, de 67, había fallecido, según los primeros indicios, por confirmar, semanas después. Hacía sólo un par de días. Su cuerpo se hallaba tumbado en el suelo, desnudo, junto al mismo sofá.

La Policia Judicial Guardia Civil y la forense de los juzgados de Torrevieja investigan los hechos. Del análisis inicial, según las mismas fuentes, no se habrían hallado signos aparentes de violencia. La primera hipótesis pasa porque la mujer falleció por causas naturales. El hombre, sin alertar de este fallecimiento, pudo perder la vida también por causas naturales, hace unos días.

La investigación se centra precisamente en ese dato anómalo. Que el hombre no advirtiera el fallecimiento de la mujer. Siempre según las mismas fuentes, la pareja arrastraba problemas con el alcohol. Los residentes en este piso habían llegado a la ciudad hace unos años, procedentes de Madrid.

El levantamiento de los cadáveres se produjo pasadas las ocho y media de la tarde. Los efectivos de emergencias, Guardia Civil y forense tuvieron que tomar medidas preventivas por el fuerte olor que desprendía una de las víctimas.

Los vecinos se mostraron ayer muy sorprendidos por este suceso. Uno de los residentes en este edificio, situado en la equina de la calle Bella Antonia con Pascual Flores, indicó que lleva residiendo en el inmueble ocho años, pero nunca había visto a la pareja. En el mismo sentido se expresaron otros residentes del mismo inmueble, aunque uno de ellos sí aseguró que ya se habían producido quejas por el mal olor que se percibía desde la vivienda que ocupaban.