El conductor del autobús que fue interceptado en Villarejo de Salvanés (Madrid) por la Guardia Civil el pasado fin de semana por sextuplicar la tasa de alcoholemia no ha acudido al juicio rápido al que estaba citado hoy, por lo que el juez ha dictado una orden de busca y captura.

Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, ha sido el magistrado titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Arganda del Rey quien ha adoptado esa decisión.

El conductor fue detenido la tarde del sábado por los agentes a la altura del kilómetro 48 de la A-3, en una gasolinera de Villarejo después de dar 0,77 miligramos por litro en aire espirado en la segunda prueba de alcoholemia y 0,81 en la primera, cuando la tasa máxima permitida para conductores profesionales es de 0,15.

El autobús, de la empresa Alsa, había partido a las 15:30 horas de la estación Sur de la capital con 40 pasajeros a bordo para realizar el trayecto hasta Murcia.

Al parecer, los pasajeros se percataron de que el hombre no manejaba el vehículo en las debidas condiciones e hizo caso omiso a las peticiones de que pusiera el aire acondicionado.

Finalmente, lograron que parara en la gasolinera, a 48 kilómetros de Madrid, para comprar agua, momento que aprovecharon los pasajeros para llamar al 112, que a su vez contactó con la Policía Municipal y con la Guardia Civil.

El chófer estaba citado esta mañana para comparecer en un juicio rápido imputado por la supuesta comisión de un delito de alcoholemia.