José Enrique Abuín Gey, autor confeso de la muerte de Diana Quer el 22 de agosto de 2016 y detenido el pasado 29 de diciembre, no renuncia a su familia, aunque públicamente su madre y sus hermanas le han repudiado. El sábado pasado recibió en la prisión pontevedresa de A Lama la primera visita de su mujer, Rosario Rodríguez, con su hija adolescente. "El Chicle" ya ha solicitado autorización para un segundo encuentro con ambas a Instituciones Penitenciarias.

El primer contacto directo de Abuín Gey con su mujer y su hija el sábado, como adelantó FARO DE VIGO en exclusiva, fue una visita a petición de la menor, que duró unos 45 minutos y que se enmarca en la denominada "comunicación por cristales", la habitual de los fines de semana en los centros penitenciarios de toda España. Un grueso cristal separa al reo de sus visitas, a las que puede hablar pero no tocar ni abrazar.

Ahora Abuín ha pedido un vis a vis familiar, es decir una comunicación directa, sin cristales por medio, con Rosario y su hija en una celda privada y especialmente diseñada a tal efecto. Unos encuentros que suelen tener una duración de hora y media en los que pueden participar hasta cuatro familiares. Mesas, sillas e incluso un sofá, permiten tomar a los reunidos una merienda o refrescos adquiridos en el economato de la cárcel. De momento, "El Chicle" no ha pedido un vis a vis íntimo con Rosario, su mujer, a quien el juez de Ribeira desimputó de la causa como supuesta colaboradora del homicidio, medida que han recurrido en apelación ante la Audiencia de A Coruña los padres de Diana Quer.

Mientras "El Chicle" sigue sin prestar declaración judicial en el Juzgado de Instrucción 1 de Ribeira, al haberse negado en las dos comparecencias que ha tenido, la Guardia Civil intenta cerrar los flecos de la investigación.

Una vez que el informe preliminar de la autopsia determina que la joven falleció estrangulada y descarta el atropello mortal, al que se aferró Abuín Gey cuando se confesó autor de la muerte de Diana en el cuartel de la Guardia Civil de A Coruña y llevó a los investigadores hasta el depósito de agua de la fábrica de gaseosas de Asados, en el que había ocultado el cuerpo de la joven casi 500 días antes, los investigadores tratan de esclarecer cuándo y dónde tuvo lugar el homicidio.

Las antenas de telefonía que situaron juntos en el mismo coche a "El Chicle" y a su víctima aquella madrugada del 22 de agosto de 2016, determinan también que el presunto homicida permaneció en la nave donde ocultó el cuerpo durante casi una hora. Concretamente llegó con la joven a las 3.04 horas y se marchó del lugar a las 4.09. Los agentes tratan de esclarecer qué ocurrió durante esa hora, por lo que resulta clave la inspección ocular y también la reconstrucción de los hechos que ha pedido la familia Quer. Buscan respuestas a si Diana llegó viva o muerta a la nave y donde la mataron.