Una joven de 23 años de edad se debatía anoche entre la vida y la muerte después de caer desde un sexto piso al patio interior de una finca de Valencia cuando trataba de recoger una toalla del tendedero, según las primeras investigaciones que ha abierto la Policía Nacional. La joven, de nacionalidad paquistaní y que reside con su familia en un edificio del valenciano barrio de Camí Fondo, se precipitó accidentalmente por la ventana que da al patio interior de la finca y logró asirse al tendedero del quinto piso, justo debajo de su vivienda. Sus desesperados gritos fueron los que pusieron sobreaviso a los vecinos y a su padre. Varias personas alertaron al 112, que envió al lugar dotaciones de la Policía Nacional y de los bomberos, así como una ambulancia.

Pero ni siquiera les dio tiempo a llegar. La chica resistió cuanto pudo, colgada del tendedero, pero finalmente las fuerzas le fallaron y acabó cayendo al fondo del patio sin que nadie pudiera ayudarla.

Cuando llegaron los primeros agentes, la chica estaba aún consciente, pero acabó perdiendo el conocimiento, lo que hizo temer por su vida. Poco después llegó la ambulancia del SAMU y el equipo médico logró estabilizar sus constantes vitales, tras lo cual fue trasladada de urgencia al Hospital Clínico de València, donde permanecía anoche en estado muy grave tras haber sido intervenida.

Al parecer, la joven estaba sola en casa con su padre en el momento de ocurrir los hechos, sobre las siete y cuarto de la tarde y, según los primeros datos, se precipitó accidentalmente al vacío cuando trataba de coger una toalla del tendedero, ya que se iba a la ducha.

De hecho, no había muestra alguna de lucha en la estancia ni en el resto de la casa, que fue revisada por la Policía ante la sospecha de que alguien la hubiese empujado o de que hubiese caído al vacío huyendo de una posible agresión.

La Policía Nacional tomará declaración al padre y a la chica, en cuanto los médicos lo autoricen, para comprobar definitivamente que la caída fue accidental.