Concretamente, desde el pasado 4 de diciembre hasta el 23 de marzo, United Airlines, Air New Zealand y Japan Airlines completaron un total de 57 vuelos dentro del programa 'Tailored Arrivals', que reduce el consumo de combustible durante los descensos de los vuelos hasta el 39% dependiendo del tipo de avión, y que recorta significativamente las emisiones contaminantes.

El vicepresidente de Boeing, Kevin Brown, destacó que iniciativas como esta son potencialmente rápidas y "relativamente bajas en coste" porque la tecnología utilizada para ellas ya está disponible.

El programa permite a los aviones utilizar todos los datos disponibles para su descenso a tierra con una intervención mínima del control del tráfico aéreo.

El proyecto se basó en tecnologías clave suministradas por la Administración Federal de la Aviación estadounidense (FAA) y la NASA.