China ha decido entrar en liza en la batalla para suceder al DVD, ahora que el Blu-ray ya se ha comido definitivamente al HD-DVD, con un nuevo disco óptico de alta capacidad basado en éste último.

Cansada de pagar licencias por el uso de discos ópticos de empresas extranjeras, en este caso japonesa, la Shangai United Optical Disc ha decido tomar parte activa en el mercado de los discos ópticos. Actualmente aún domina el mercado el DVD pero pronto un nuevo disco que le quintuplica en capacidad y permite Alta Definición, entre otras virguerías, será el que tome las riendas: el Blu-ray de Sony.

Después de una batalla con Toshiba -con Microsoft como gran apoyo-, que había apostado por el HD DVD, finalmente fue Sony quien se llevó el gato al agua. Toshiba anunció el pasado febrero el fin de la producción de los discos y reproductores, dejando el camino libre a su rival, el Blu-ray. Sin embargo, el gigante asiático se ha levantado, ha dado un puñetazo encima de la mesa y se preprara para plantar cara con un nuevo disco.

El China Blue High Definition (CBHD) está basado en la tecnología del HD DVD y ha sido bautizado como CH DVD; DVD Chino, para los poco amigos de la siglas. De momento solo se comercializará en el mercado de aquel país, con nada menos que 1.000 millones de clientes potenciales, lo que ya es suficiente para impulsar un nuevo formato. Una de sus bazas es que cuenta con códecs de audio y vídeo propiedad del Gobierno y otras tecnologías ya asociadas al formato como protección de copia avanzada.

VENTAJAS E INCOVENIENTES.

Sin embargo, el CH DVD lo tiene muy complicado para alzarse con el liderazgo en este terreno. El Blu-ray ha hecho valer su tiempo de presencia en solitario en el camino a la sucesión del DVD y ha creado una cantera de clientes ya importante, así como un absoluto apoyo por parte de casi todas las compañías. Además, el tiempo ha hecho que bajen notablemente los precios de los reproductores y discos, así como de la Playstation 3, que usa este formato y está sirviendo de empuje para la ascensión del Blu-ray.

Sin embargo, el precio podría ser una de las bazas, precisamente, del nuevo disco chino a corto plazo. Las cadenas de montaje para elaborar discos CH DVD les cuestan a la Shangai United Optical Disc 800.000 dólares, mientras que Sony tiene que poner encima de la mesa 3 millones cada vez que quiere hacer lo propio con la tecnología Blu-ray. Todo por no hablar de que las licencias son considerablemente más económicas.