Los ingresos por servicios móviles crecieron el 3,8 por ciento en el semestre y el resultado operativo bruto (EBITDA) creció el 0,9 hasta los 379 millones de euros.
Al terminar el mes de junio, Orange contaba con 11.174.000 clientes de telefonía móvil, un 5 por ciento más que hace un año, de los que el 56 por ciento eran de contrato (11% más que hace un año).
De estos más de once millones de clientes, 2.436.000 tenían teléfonos de tecnología 3G, lo que supone multiplicar por 2,6 los de hace un año.
El ingreso medio por cliente y mes se mantuvo estable en 24,9 euros, aunque bajó el ingreso por voz que se compensó con el incremento del 8 por ciento de los ingresos por datos. En el segundo trimestre el ingreso por cliente en datos subió el 13,1 por ciento.
El "churn" o desconexión de clientes se fijó en 17,9 por ciento frente al 19,8 por ciento de hace un año.
Los acuerdos que ha firmado esta operadora con operadores móviles virtuales, que utilizan su red para dar servicios, han hecho que hasta el 30 de junio un total de 405.000 clientes de estas empresas utilicen su red, lo que supone multiplicar por 3,4 veces los del año anterior.
Respecto al negocio de telefonía fija, Orange registró unos ingresos de 362 millones, un 2,2 por ciento más que hace un año y destaca el incremento del 22 por ciento en la facturación de los clientes ADSL que compensa el declive del negocio tradicional y mayorista.
En total cuenta con 1.192.000 clientes de fijo, un 14 por ciento más que hace un año de los que 847.000 son bucle local (alquilado a Telefónica), un 35% más que hace un año.
El ingreso medio por cliente es de 28,7 euros, un tres por ciento más.
Al cierre del semestre Orange contaba con 92.000 clientes de televisión por IP, frente a los 16.000 de hace un año.
