El serial en mayúscula se emite a diario en Canal Sur: Arrayán, con sus más de 2.000 capítulos y 11 años en antena, es actualmente la serie en español más longeva de cuantas ofrecen más de un episodio a la semana. La producción de Linze para el canal autonómico andaluz tiene además la particularidad de que se rueda en las instalaciones malagueñas situadas a las afueras de Coín e incorpora con frecuencia exteriores de toda la Costa del Sol.

Sus responsables destacan, en estos tiempos tan difíciles para la industria audiovisual, lo que supone dar empleo durante este periodo a más de un centenar de personas, contratadas directamente, y a una multitud de proveedores externos, como puestos de trabajo complementarios o indirectos.

La joven malagueña Paula Meliveo, una de las actrices del reparto actual -2.000 capítulos han dado de sí tanto como para situar el listado de intérpretes en más de medio millar-, subraya ese aspecto económico: «Cualquiera de los ayuntamientos de la zona que se ha ofrecido para rodar exteriores ha recibido respuesta. En estos días hemos estado en el paseo marítimo de Los Álamos, en Torremolinos, y también estrenamos el nuevo espacio peatonal del Puerto de Málaga. La serie es un gran escaparate para la Costa del Sol y trabajar en general en Andalucía es un privilegio para quienes hemos nacido en esta tierra», explica.

«Para mí es un orgullo volver a Málaga y aportar mi trabajo a una serie que tiene numerosos récords en audiencia y continuidad. En Madrid se sigue muy de cerca todo lo que ocurre aquí, porque de esta producción han salido grandes talentos», argumenta. El actor Alberto Ferreiro, que interpreta desde hace un mes a Lolo, destaca el ritmo de grabación de Arrayán: «Venir a Coín y adaptarte al ritmo de trabajo de este equipo, que es justo el doble de veloz que el de cualquier otra producción televisiva, te curte mucho como actor. Es como si fuese un curso intensivo en la mejor de las escuelas. Una vez que te sueltas en una serie de estas características, ya puedes tener confianza en sacar adelante cualquier otro trabajo», manifiesta.

Nuevos personajes. Celine Fabra hace de Marta, precisamente la novia en la ficción de Alberto, y también está «encantada» con haber tenido el privilegio de incorporarse a Arrayán. «Es ver cumplido un sueño, esto de participar en un proyecto tan importante. Pero incluso es mucho mejor de lo que siempre soñé. Es muy pero que muy bueno. Además me encuentro muy bien trabajando con el resto de actores. Hay muy buena química entre nosotros. En cuanto a mi papel, a quienes siguen la serie les puedo adelantar que van a producirse muchas novedades y muy intensas».

Otro anticipo, a través de estas páginas: Roberto San Martín, uno de los nuevos rostros de esta nueva temporada, interpreta desde mañana a Alberto de Villena. El personaje dará también nuevas perspectivas a la trama y complicará la rutina del hotel Arrayán. Al igual que Alberto Ferreiro, este actor de origen cubano apunta que volver a una tierra tan volcada con la industria cinematográfica supone un aliciente añadido: «Desde aquí les decimos a los organizadores del Festival de Cine de Málaga que estamos a su entera disposición para volver a disfrutar de uno de los acontecimientos de nuestro país donde mejor se nos trata», indica.

San Martín asegura que trabajar en Málaga tiene un peculiaridad añadida: «Aquí la gente te trata con un respeto tremendo. Te demuestran su cariño por lo que haces de una forma muy especial. Me gusta mucho esta parte de España. El clima además es ideal para poder rodar en exteriores y, encima, el ambiente en esta producción es de los mejores que he conocido. No me extraña que de aquí se hayan podido a conocer nuevos compañeros. Es un trampolín magnífico», incide el intérprete.

En las redes sociales. Juan López, responsable del departamento de comunicación de la serie, destaca que a diario ven la serie más de medio millón de andaluces. «Lo bueno es que hay una continua regeneración del público. Hemos incorporado la serie a las principales redes sociales, a través de perfiles en Facebook o Twitter, y estamos muy satisfechos de la respuesta. Hemos notado que se han agregado nuevas generaciones, de 25 a 45 años, a partir de esas nuevas herramientas y de la puesta en marcha de una nueva etapa con personajes diferentes y tramas a las que se han enganchado nuevos espectadores».

El secreto de la longevidad de la serie está también en los costes de producción. López reconoce que al ritmo elevado de grabación, con hasta dos capítulos diarios, se la añade un aspecto muy competitivo, como es el bajo coste para la cadena autonómica. Buenos resultados en cuanto a la audiencia media hacen el resto para superar el listón de una década entera en antena. Además, en Coín disponen de todas las comodidades en cuanto a accesos y proximidad de la capital malagueña para el rodaje de exteriores en una gran ciudad. «Ya se rodó aquí mismo Plaza Alta y también hemos aprovechado algunos decorados de la Ciudad del Cine de esta localidad».

No obstante, los estudios de Linze TV en Coín no están ubicados en esas instalaciones, sino que está acondicionado un espacio de uso propio junto al IES Los Montecillos, en la urbanización del mismo nombre situada a las afueras, junto a la carretera hacia Marbella. Pero la producción sale con frecuencia a la calle y no son pocos los malagueños que han podido disfrutar de cerca del rodaje de algunas secuencias. Este pasado viernes, por ejemplo, el paseo marítimo de Los Álamos acogió a decenas de curiosos y transeúntes mientras tomaban protagonismo actrices como María Delgado, Isabel en la serie, que pasar por ser una de las veteranas de todo el elenco principal, o la reseñada Paula Meliveo.

La segunda, acerca de la interactividad que hoy por hoy generan las redes sociales, subraya que muchos seguidores piden que se recupere la estrategia de Canal Sur, que durante un tiempo emitió los domingos tres capítulos seguidos. Era una forma de dar un plus a los más fieles y, además, se incrementaba el ritmo. Juan López sostiene que con los parones obligados por la Liga de Campeones, algunos martes o miércoles, se ralentiza la emisión y la trama parece que evoluciona mucho menos. «Al perder un día recibimos ese tipo de puntualizaciones. El público quisiera que no se perdiera el ritmo, pero dependemos de esos acontecimientos que deben emitirse en directo obligatoriamente», concluye.

Arrayán también esconde uno de sus secretos mejore guardados en la categoría profesional de sus directores. Tito Rojas, con una dilatada experiencia en seriales latinoamericanos como Topacio o Cristal, fue máximo responsable de esta producción hasta mediados de la pasada década. Su sabia mano a la hora de afrontar este tipo de producciones fue la mejor escuela para los cinco realizadores que siempre coordinan todas las grabaciones. Uno de ellos, Ismael Morillo, fue el siguiente director, hasta hace dos temporadas. Y en la actualidad es Leo Vargas el encargado de dar vida a Arrayán, como máximo responsable.

Linze TV, con multitud de premios nacionales por esta producción -incluido el Ondas a la mejor serie de televisión-, confía en que la audiencia contribuya a generar récords. Por lo pronto, las cifras apuntalan día a día esos deseos.