El malagueño Mario Melero López, licenciado en INEF y profesor de educación física, acaba de dar un paso cualitativo en su carrera como árbitro profesional, ya que la próxima campaña dirigirá los encuentros de Segunda División.

Este malagueño de 29 años recibió ayer la noticia el mismo día que su cumpleaños, por lo que no pudo haber mejor regalo para él. "Es una alegría muy grande. Estoy muy contento y dar este paso es muy difícil", admitió Mario a este periódico.

El colegiado, que suma seis campañas en Segunda División B, recoge la batuta de la gran saga de árbitros malagueños y sueña con estar en Primera División en pocos años. "Subir a Segunda es lo más difícil. Ahora con trabajo y con paciencia me podrá llegar la oportunidad algún año", asegura.

Mario ha sido elegido entre los 120 árbitros que hay en toda la Segunda División B, pero el Comité Técnico de Árbitros lo ha elegido por sus actuaciones. "No es que me lo esperara, pero he hecho una temporada muy buena. Yo estaba contento y además he dirigido una fase de ascenso, requisito indispensable para ascender de categoría", comentó un ilusionado Mario Melero.

Ambición. El colegiado malagueño dirigirá la próxima campaña en Segunda División, categoría que acaba de abandonar el Málaga, pero espera llegar a la máxima categoría del fútbol nacional en breve, pero no se obsesiona. "Acabo de subir a Segunda y no quiero pensar en Primera. Ojalá pueda seguir los pasos de Paradas Romero y estar ahí arriba, pero es complicado", admitió.

A sus 29 años, este colegiado malagueño representará a la provincia de Málaga en la segunda categoría nacional.

El colegiado malagueño debutó en Segunda División B el 15 de septiembre de 2002, con Linares 1-2 Sevilla B. De aquella fecha tan lejana dará paso a su debut en Segunda División esta campaña. Los ´hombres de negro´ también hablan malagueño en Segunda.