"Es mi arma secreta", proclama Rafa Benítez, considerado uno de los entrenadores más minuciosos del mundo, que más partido le saca a las nuevas tecnologías del fútbol. El entrenador del Liverpool se refiere al Amisco, un sistema que permite analizar de la forma más realista y precisa posible lo que ocurre en un campo de fútbol.

El Amisco va mucho más allá de las tradicionales estadísticas de pases y remates, ya que da una visión más global del terreno de juego y permite el seguimiento de los jugadores de forma individual o colectiva. Marcelino García, ex entrenador de Racing y Recreativo, intentará implantarlo esta temporada en el Real Zaragoza en su apuesta por regresar a Primera.

Amisco es un producto de Sport Universal Process (SUP), empresa fundada en 1995 que se ha convertido en líder mundial de análisis para el fútbol profesional. El sistema es utilizado en estos momentos por unos 40 clubes de cuatro de las principales ligas europeas (Inglaterra, Francia, Alemania y España), algunos tan importantes como el Chelsea, Manchester United, Liverpool, Real Madrid, Valencia, Bayer Leverkusen y Olympique de Marsella.

Yan Gaillet, director general de Amisco España, empresa con sede en San Sebastián, explica que su primer cliente fue la Federación Francesa de Fútbol, que contó con el Amisco como uno de sus apoyos para preparar el Mundial de 1998 que acabaría ganando.

El proceso se inicia con la instalación de unos captores de imágenes, más parecidos a las cámaras de videovigilancia que a las habituales de televisión. Dependiendo del campo, de la altura de la grada se colocan entre seis y ocho captores, lo que permite abarcar todo el terreno de juego.

25 imágenes por segundo. Según Gaillet, la clave de la precisión y fiabilidad del sistema Amisco está en que permite medir 25 veces por segundo la posición exacta de cada uno de los jugadores. "Ya hay varias tesis doctorales en España que validan los datos del Amisco", precisa el director general, que destaca que entre los clubes españoles "es donde mejor acogida" ha tenido.

"Con el Amisco no vas a tener la vida resuelta, pero sí te soluciona algunas dudas. El mejor es Rafa Benítez, pero muchos clubes han integrado a preparadores físicos que son universitarios". "Benítez lo utiliza para transmitir su idea de cómo quiere que juegue su equipo, de cómo deben moverse los jugadores en cada circunstancia del juego", recalca Gaillet, sin que esto dé más argumentos a los que se quejan de la excesiva mecanización de la mayoría de los entrenadores.

"Al final, el gol es arte. Nosotros no analizamos el partido, sólo damos un servicio. Después, cada uno tiene su manera de ver el fútbol", remata el representante de Amisco en España.

Una de las premisas de Sport Universal Process es la confidencialidad. Los datos son de los clubes, de nadie más. "Protegemos los datos de nuestros clientes y no los vendemos a la prensa. Por eso no somos muy conocidos fuera de los clubes". Gaillet tampoco quiere hablar del dinero que supone el montaje y desarrollo del Amisco, aunque para hacerse una idea apunta que el informe de cada partido ronda los tres mil euros.

El Amisco reproduce en dos dimensiones las imágenes captadas por las cámaras instaladas en los campos. Los jugadores se convierten en círculos que se mueven tal como lo hicieron los jugadores de carne y hueso. Basta acercar el cursor del ordenador a uno de esos puntos para saber de quién se trata, la distancia que lleva recorrida en el partido y la velocidad instantánea.

"Los entrenadores lo utilizan mucho para corregir las distancias entre líneas o entre los propios jugadores. No te da soluciones, pero te quita muchas inquietudes que puedas tener", resalta Gaillet, quien no se cansa, sin embargo, de insiste en que "ayuda al entrenador y a la preparación del partido, pero el fútbol es gol, el gol es arte y el arte lo ponen los jugadores en el terreno de juego".

Ismael Fernández, que ha acompañado a Marcelino García como preparador físico en su trayectoria profesional, escuchó hablar del Amisco durante su etapa en el Recreativo y, aunque el Racing no lo tenía contratado la pasada temporada, pudo analizar algún partido y darse cuenta de sus prestaciones, que resume en dos grandes apartados: "Te proporciona datos desde el punto de vista físico y de los movimientos tácticos".

"A partir de ahí -añade el ahora preparador físico del Zaragoza- puedes individualizar las líneas, para ver por ejemplo los movimientos de la defensa o la distancia entre líneas. Te permite dibujar un mapa ocupacional, es decir, cómo se ocupa el campo".