El Málaga no tiene este año ´niña bonita´. Cuando faltaban pocas horas para el estreno en Primera División ante el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón, el dueño del dorsal número quince era el centrocampista de Bormujos José Juan Luque. Sin embargo el extremo izquierdo sevillano decidió cambiar a última hora, y se decantó por el ´16´ para sorpresa de propios y extraños.
Albert Luque, el último en sumarse a la plantilla eligió el ´5´ que dejaba libre Álvaro Silva al ir cedido al Xerez Deportivo. De esta manera, el ´15´ es el único guarismo del Málaga que no se verá en ningún campo de fútbol, porque nadie lo ha elegido.
Es la ficha libre que ocupará el refuerzo invernal en caso de que la dirección deportiva decida firmar a un jugador, en el supuesto de que consideren que mejora la calidad actual existente en el equipo.
El número 15 ha sido en la última década ´maldito´. La excepción que confirma la regla fue la de Gerardo García, que triunfó como jugador por su polivalencia, sobre todo como lateral derecho, aunque también llegó a jugar de mediocentro, interior derecho e incluso de lateral zurdo.
El sevillano de nacimiento pero riojano de corazón permaneció en el club blanquiazul desde la temporada 2001/02 hasta la 2005/06, pero sólo en su primera campaña tuvo a su espalda el citado guarismo. En los restantes años fue Manu Sánchez el que se hizo con la llamada ´niña bonita´. En total, el fuengiroleño, que sólo rindió a satisfacción en la segunda vuelta de la campaña 2002/03 -seis goles-, ha sido uno de los futbolistas que han salido peor parados del club de Martiricos, tras formar parte de un Expediente de Regulación de Empleo después de haber sido apartado del equipo. Manu nunca quiso cambiar de dorsal pese a que las cosas le fueron mal.
El ´15´ fue, a su vez, el número elegido por el delantero Genilson en la campaña 1999/2000, la del ascenso a Primera División. El brasileño, que venía al club blanquiazul avalado por Rivaldo, fue un auténtico fiasco. De hecho, Genilson sólo llegó a disputar 65 minutos -tres partidos, ningún gol, ante Alavés, Real Madrid y Mallorca, y ninguno como titular-, fue convocado tan sólo en diez partidos y salió con más pena que gloria al acabar la temporada.
En la siguiente Liga, el propietario de la mencionada cifra fue el navarro Ismael, que disputó la ridiculez de cinco encuentros -los dos frente a Barcelona y Numancia, y uno ante Osasuna, todos como suplente, ningún gol- y también hizo las maletas al finalizar el campeonato liguero.
El último heredero de la camiseta con el ´15´ atrás fue Santiago Carpintero. El leonés hizo una brillante campaña. Sin embargo, al acabar la Liga se le invitó a marcharse porque no entraba en los planes del cuerpo técnico y actualmente juega en el Córdoba, de Segunda División.
Este año no habrá ´Pleno al Quince´, un número que parece destinado al fatalismo, casado con la maldición, propicio para el fracaso. Nadie ha querido un número que da pavor en el vestuario, reservado al fichaje del mercado de invierno porque todo el mundo huyó de él como de la peste. Hay quien comienza a llamarlo el 14+1, como suele hacer el campeonísimo Ángel Nieto con el 12+1, número de los mundiales que ganó el piloto de motociclismo.
Como curiosidad, cabe decir que todos salvo Gerardo nacieron a final de mes y que la suma del mes de nacimiento de los cuatro -Genilson, Ismael, Manu y Carpintero- da quince.
