Lo nunca visto en cerca de media vida dedicada a adiestrar a los equipos del fútbol base veleño. Lo ocurrido el pasado sábado tras el partido de cadetes Vélez-La Mosca tardarán en olvidarlo los técnicos José Manuel Moreno o Pedro Amador. Un canterano del equipo con sede en la barriada malagueña de El Palo sacó en el túnel de vestuarios un martillo y la emprendió a golpes contra la cabeza de un rival, José Manuel, de apenas 15 años. «Ha podido matarlo, según nos han dicho los médicos en el hospital. Afortunadamente no le dio en ningún punto vital».

El susto fue monumental. El incidente ocurrió instantes después de las dos de la tarde, a escasa distancia de donde se celebraba la Feria de día de Vélez Málaga. Apenas tardaron unos minutos en personarse agentes de la Policía Local, que instruyeron diligencias ya remitidas a la Fiscalía de Menores, y justo después se procedió a trasladar en ambulancia al futbolista herido. En el Hospital de la Axarquía recibiría en la cabeza varios puntos de sutura y sería dado de alta al filo de las cuatro y media.

El coordinador de la escuela veleña de fútbol Francisco Castejón, Pedro Amador, manifestó a este periódico que hoy se reunirá la directiva para estudiar la interposición de una denuncia ante la Fiscalía de Menores. Y también desde fuentes cercanas a la familia se ha confirmado que se ha tramitado otra denuncia, en los mismos términos, «donde consta la agresión y las consecuencias que tuvo, con la aportación del correspondiente parte médico».

Amador confirmó que durante el partido la actitud de los cadetes de La Mosca fue «agresiva». Y matizó que hubo «amenazas a raíz de la victoria» de los locales. El preparador de la escuadra veleña, al objeto de evitar incidentes «retrasó la retirada a vestuarios, con los típicos ejercicios para estirar».

Pero cuando los jugadores del Vélez acabaron de ducharse y salieron del vestuario, en el pasillo se encontraron con dos futbolistas rivales «que estaban esperándoles; y uno de ellos abrió su mochila, sacó un martillo, y sin mediar palabra, empezó a golpear por la espalda a José Manuel».

El presunto agresor, cuya identidad no ha trascendido, fue retenido por directivos locales y por el padre del joven al que propinó los martillazos. Y posteriormente fue detenido por una patrulla de la Policía Local y trasladado hasta la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. Ayer mismo ya prestaron declaración tanto directivos como técnicos de la escuela de fútbol de Vélez Málaga.

Medidas federativas

El club veleño ha avanzado también que se trasladará un expediente informativo hasta la sede de la Federación Malagueña de Fútbol, de forma que no sólo haya medidas legales contra el agresor, sino que también se establezcan «medidas federativas».

El club al que pertenece el herido, por otra parte, recibió ayer las disculpas de la directiva de la Unión Deportiva La Mosca: «Es lo mínimo. Agradecemos el gesto, pero no podemos ocultar nuestro profundo malestar por lo que le ha ocurrido a un jugador nuestro. Lo que le ha pasado a La Mosca le podía haber pasado a otro club, pero lo normal en estos casos es tomar medidas para que nunca más vuelva a ocurrir lo mismo en un estadio de fútbol», reiteró el propio Pedro Amador.

En la película del encuentro se registraron varios incidentes previos a los martillazos en el pasillo de vestuarios. Ya sobre el campo se sucedieron «las provocaciones y escupitajos. Incluso con el propio árbitro, porque al parecer, uno de los jugadores visitantes le lanzó una botella cuando decretó su expulsión».

Los testigos de los hechos fueron múltiples, como también señalaron directivos del club local. «Estaba el presidente delante, y Moreno, el entrenador. Lo mejor es que la Policía Local ha actuado de inmediato y han podido identificar y detener al menor. La familia está muy afectada, pero sabe que el agresor va a pagar por lo que ha hecho», matizaron.