El ciclista español Alberto Contador (Saxo Bank-Sungard), sorprendido por haber conseguido tanta ventaja con respecto a algunos de sus rivales en la decimosexta etapa del Tour de Francia, disputada entre las localidades de Saint-Paul-Trois-Châteaux y Gap, sobre 162,5 kilómetros, desveló que, aunque las sensaciones no son las mejores, tenía pensado atacar

"Es una sorpresa. Prensaba que eran 20 segundos o así. Pues estoy muy contento, entonces. Ha sido una diferencia grandísima mucho mayor de lo que podía esperar", expresó, a su llegada a meta al enterarse del tiempo que había recortado a sus rivales.

El pinteño desveló que "desde el principio había salido con la idea de atacar" porque tiene claro que no puede "desaprovechar ningún día", aunque sus "sensaciones no son las mejores". "Pero hay que aprovechar cada momento y si esa renta es la que he sacado es para estar muy contento", repitió.

"En todo momento tenía clarísimo que quería atacar, me daba igual quien cogiera mi rueda, sabía que alguno podría fallar y, mejor de lo que esperaba", reconoció, lamentando que Samuel Sánchez (Euskaltel) no hubiera podido ayudarle a abrir más ventaja: "Ha sido una lástima porque ha sido con el único que he hablado antes del puerto para decirle que iba a atacar, pero me ha dicho que iba justito. Ha sido una lástima, porque igual podríamos haber ampliado la diferencia".

De todas formas, Contador no quiso lanzar las campanas al vuelo y eludió utilizar lo sucedido este martes como referencia para la llegada de los Alpes. "Queda mucho, ha sido un buen día, ahora recuperar y pensar en mañana. Va depender mucho de la meteorología, que hoy ha sido bastante mala. La bajada era peligrosa, pero estoy contento con el resultado", recalcó.

"Nunca se sabe, pero es una buena noticia estar por delante", valoró el español, satisfecho por la recompensa a su esfuerzo y enfilando ya el camino hacia el bus del equipo para "ver las clasificaciones y sacar conclusiones".