El entrenador del Balonmano Antequera, Antonio Ortiz, sólo tendrá a nueve jugadores de la primera plantilla para recibir esta tarde al Amaya Sport (18.30 horas) en el Fernando Argüelles, en el primer encuentro que disputará el equipo en casa tras el parón por el Europeo y en el «debut» de la instalación sin agentes de seguridad privada, función que realizará la propia junta directiva.

Los nueve hombres se pueden quedar en siete para la próxima semana, ya que el pivote Paco Bustos y el central Gerard Espigol tienen sendas propuestas del Pozoblanco para marcharse de inmediato a tierras cordobesas. La próxima semana podrían dar el paso ante los graves problemas económicos que vive la entidad. Y seguirían los de el capitán Juanan Ramos y el extremo derecho Jesús Hoyos. Los dos ya no forman parte del club, hastiados de los atrasos en los pagos.

Juanan Ramos deja la entidad por la puerta de atrás tras haberlo dado todo por un equipo al que se unió hace ya nueve temporadas, cuando militaba en Primera Nacional, y con el que ha ascendido a División de Honor B y a la Liga Asobal. El «capi», al que se le adeudan ya 18.000 euros, no aguantó más la presión y, tras una acalorada reunión con responsables del club, dio un portazo y dejó atrás para siempre su fructífera etapa en el club.

Mientras, el Balonmano Antequera presentó ayer al nuevo patrocinador del equipo, la empresa de construcción Maygar, que se ha comprometido a abonar 40.000 euros como patrocinio. El club ha prometido a la plantilla que cobrará al menos una mensualidad la próxima semana de las tres que se les adeuda.

Y en esta situación, el equipo compite hoy ante el Amaya Sport (18.30 horas), un partido en el que jugará el balcánico Radulovic, recién llegado de Belgrado. A pesar de su vuelta, el técnico sólo tiene a nueve jugadores –dos son porteros–, y tendrá que tirar de chicos jóvenes como Marcelo o Mario Ruiz.