Fernando Alonso (Ferrari), que arrancará octavo en el Gran Premio de Malasia, la segunda prueba del Mundial de Fórmula Uno, declaró, sábado, en Sepang, que había sido "una calificación muy complicada".

"No fue fácil pasar la Q1 y tampoco fue fácil pasar la Q2. Luego en la Q3 sabíamos que no íbamos a poder luchar con los punteros. Pero al final hice noveno y con la sanción a Kimi (Raikkonen, de Lotus) saldré octavo. Así que a ver qué pasa, porque es una carrera en la que puede llover en cualquier momento", opinó el doble campeón mundial de Fórmula Uno.

"Ayer los neumáticos se comportaron bien y no hubo mucha degradación en las tandas largas. Si la carrera es en seco podemos tener alguna posibilidad y si es con lluvia se pueden mezclar mucho las cosas. Y si estamos retrasados nos puede ayudar", comentó Alonso.

"Lo mejor sería hacer una buena salida, tener un buen ritmo de carrera y que no lloviese, para intentar estar entre los primeros cinco", indicó Alonso.

"No empezamos el campeonato bien, pero quedan muchas carreras. Después de Australia, sólo hay cuatro personas más contentas que nosotros, que son los cuatro primeros. Luego estamos nosotros", apuntó.

"Y mañana veremos cuántos puntos podemos conseguir aquí y pasar estas dos carreras de grandes dificultades de la mejor manera posible", dijo Alonso.

"La de Australia la pasamos con buena nota y mañana esperamos hacer también un buen trabajo, conseguir muchos puntos. Lo que digo, son dos carreras en dificultades claras y visibles que intentaremos resolver de la manera mejor posible", explicó.

Posibilidad de lluvia

"Justo más o menos en las vueltas que tienes que hacer tus paradas, si en los 'stints' (las tandas) estaría bien que llueva justo cuando tienes que hacer tus cambios, porque si haces una parada y pierdes treinta segundos; y a las tres vueltas tienes que volver a parar porque vuelve a llover, tienes que parar otra vez", dijo.

"Por eso puedes perder cincuenta segundos en tres vueltas. Esa es la lotería de cuando llueve. No es que vayas más rápido en agua o en seco. Es el momento en el que llueve. Te puede venir bien o no a ti y a los demás", añadió.

"Por tanto, si llueve necesitaremos suerte y la máxima concentración del equipo y si no llueve también necesitaremos una concentración máxima y optimizar el potencial del coche", contestó a Efe el doble campeón mundial asturiano, que admitió que tuvo "algún problema con el KERS en la última vuelta, pero no lo suficiente como para mejorar siete décimas".

"Así que no cambia nada. Mañana veremos. La degradación en cierta medida ha sido más alta para nosotros, tanto en los test invernales como en Australia", dijo.

"Teniendo en cuenta que en la primera parada que hicimos en Australia paramos una vuelta antes que (el australiano Mark) Webber, una vuelta después que (el alemán Nico) Rosberg, saliendo el doce con neumáticos nuevos y ellos con los neumáticos de la Q3, que tenían tres vueltas, es como si hubiésemos parado tres vueltas antes que ellos", declaró el español.

"Este seguramente es un circuito de súper-degradación y habrá que cuidar los neumáticos. Habrá que estar atentos con la tracción, en las frenadas, no hacer ningún plano, ya que luego lo arrastras durante todo el 'stint'", opinó.

Una carrera complicada

"Será una carrera complicada en ese sentido. Y sobre todo en la primera curva y en la salida que es donde se juegan gran parte de las posiciones", dijo Alonso, que explicó, al ser preguntado si hay una 'hoja de ruta' para introducir las mejoras necesarias en su monoplaza, que son "un equipo profesional de Fórmula Uno".

"Claro que hay una hoja de ruta. Y claro que hay unas mejoras previstas y hay un plan establecido. No hay ningún coche nuevo en Barcelona, ni ninguna presentación antes de Barcelona, como se puede leer en algún sitio", declaró Fernando.

"Pero sí habrá una evolución constante en el coche, parecido al programa que tienen todos los demás. Un coche ya desarrollado y bueno entre comillas, tiene mucho menos margen de mejora que uno con problemas grandes como tenemos nosotros ahora", manifestó el asturiano.

"Ésa es la ventana de la esperanza: que lo que estamos conociendo del coche y la problemática que podemos tener ahora se puede mejorar más fácil que el desarrollo de otro coche que ya está más evolucionado", concluyó Alonso.