Eran pocos y parió un nuevo discurso la dirección técnica del Burgos. Ahora con el primer espada al frente: el exjugador Ramón María Calderé. Hay otra vez miedo, como lo hubo sobre el césped de San Ignacio, a que David tumbe definitivamente a Goliat. Y así lo ha expresado públicamente hasta quien fuese entrenador de esta plantilla hasta hace apenas tres meses, el exmalaguista Pablo Guede, ahora en tierras argentinas por asuntos familiares. Y es que la escuadra castellana arañó un punto en El Palo (0-0), pero es consciente de que una diana visitante mañana en El Plantío le cedería el ascenso al rival más débil de esta eliminatoria entre campeones de Tercera.

Lo cierto es que Calderé ha puesto en la diana al veterano capitán paleño, el central Jesule, que protagonizó varias acciones a su juicio polémicas: «Los que estuvimos allí lo vimos. Hubo otras cosas impropias de este juego de las que no voy a hablar. Todas las artimañas que utilizaron no las voy a comentar, pero eso sí, porque es violencia. Allí lo califiqué como agresividad porque si digo violencia a lo mejor no nos dejan ni... Sabemos lo que pasó y no vamos a entrar en esas provocaciones pero este caso hay que denunciarlo porque espero y confío que el reglamento se imponga ante un jugador muy violento. Espero que aquí no lo haga porque debería ser expulsado».

En el choque del pasado sábado es cierto que los locales supieron llevarse a su terreno el juego, pero sin que sobre el césped se reclamase dicha sanción o la de cualquier otro futbolista. De hecho, los visitantes, que apenas remataron a puerta, fueron los que sumaron un mayor número de cartulinas amarillas. Calderé calienta el ambiente con su escrito, como denuncia el CD El Palo tras leer la publicación en el Diario de Burgos.

Guede ha querido responder con una carta al técnico tarraconense. Subraya, por ejemplo, que Jesule no ha visto una cartulina roja en toda la temporada. Y puntualiza: «Lo que a mí me parece es que usted está un poco asustado de que un equipo humilde y de barrio, con un presupuesto 200 veces inferiores al suyo, le gane. Por eso está predisponiendo a sus aficionados a que sean violentos».

Ojalá que en El Plantío, el domingo, a las 18.30 horas, público y jugadores pasen página a estos episodios y antepongan en todo momento el juego limpio.