La selección española sub'21 desplegó hoy finalmente su verdadero potencial ante Holanda, el rival más potente de su grupo de clasificación, exhibiendo su mejor fútbol en lo que va de campeonato y demostrando su cartel de favorita para la victoria final.

España consigue con esta victoria acabar líder de su grupo, con todos sus partidos ganados, y enfrentarse en semifinales a Noruega, un rival en principio más fácil que la siempre peligrosa Italia, que se medirá a la selección "naranja".

Si contra Rusia y Alemania, los españoles sufrieron mucho para lograr la victoria -pese a mejorar su movilidad y combinación en el segundo partido-, contra Holanda la "Rojita" estuvo mucho más ágil y encontró la resolución ofensiva que le faltó en los anteriores choques.

El equipo titular español fue muy diferente, ya que se cayeron del once inicial siete jugadores respecto a la alineación contra Alemania: Montoya, Bartra, Alberto Moreno, Koke, Illarramendi, Tello y Rodrigo.

Aún así, el equipo continuó apoyándose en el talismán de Morata, que abrió el marcador, en la organización de Thiago y en el gran talento de Isco, que marcó el segundo gol y dejó alguna jugada para enmarcar en el estadio de Petaj Tikva.

España fue muy superior desde el inicio del encuentro a Holanda, que salió con un once totalmente renovado, pero se vio impotente para refrenar la agilidad combinadora de los de Lopetegui, que además ejercieron una presión asfixiante sobre los centrales "naranjas" para impedirles desplegar su juego.

De Gea no tuvo casi trabajo en la primera parte, mientras que Morata, que salió por primera vez como titular, aprovechó en el minuto 28 una gran asistencia de Sarabia para marcar a puerta vacía.

Isco marca el segundo

Apenas cuatro minutos después, otro pase medido, esta vez de Muniain, acabó en las botas de Isco, que regateó hábilmente al portero holandés para anotar el segundo gol.

Isco se sacó varios pases también de la manga, entre ellos uno tras amagar primero con el disparo, que dejó clavados a los defensas holandeses, antes de ser sustituido en la segunda mitad en medio de una gran ovación del público que llenaba el estadio cercano a Tel Aviv.

En la segunda parte, Holanda salió con ganas de remontar el partido y puso en bastante más apuros a De Gea, que se lució en un impresionante disparo de falta de Memphis Dey ajustado al palo izquierdo.

Aún así, España no dejó de crear oportunidades, como una de Álvaro Vázquez, que obligó a estirarse a Bizot con un magistral disparo a la escuadra de su portería.

También Illarramendi, que salió al campo en la segunda parte, empalmó un certero cañonazo que iba directo a perforar la meta holandesa sino hubiese rebotado en un defensa.

España se medirá el próximo sábado en semifinales a Noruega en la ciudad costera de Netanya, en el último paso para alcanzar la final de Jerusalén.