Hoy han arrancado las declaraciones por el presunto amaño de Levante - Zaragoza de Primera División de la Liga 2010-2011. El proceso investiga un pago ilegal de sobornos a jugadores del Levante por parte del club aragonés para que se dejasen ganar.

Según la Fiscalía, el entonces presidente del Zaragoza, Agapito Iglesias, los consejeros Francisco Javier Porquera y Francisco José Checa, el director deportivo Antonio Prieto, el entrenador Javier Aguirre y los capitanes Gabi, Ponzio y Jorge López acordaron pagar 965.000 euros a los jugadores del Levante para que les dejasen ganar. En el encuentro, disputado en el Ciutat de València, el Zaragoza se jugaba salvar la categoría, lo que consiguió tras ganar por 1-2, un resultado que mandaba al Deportivo de La Coruña a Segunda.

Está imputado el Real Zaragoza como persona y otros 41 implicados, entre ellos Agapito Iglesias, el entrenador Javier Aguirre y los futbolistas de las dos plantillas.

Ikechuwku Uche y Javier Paredes, exjugadores del Real Zaragoza, abrieron este miércoles las declaraciones en el juzgado de instrucción número 8 de Valencia por el presunto amaño.

Tras haberse aplazado las cuatro primeras sesiones de declaraciones, la jueza Isabel Rodríguez comenzó a tomar este miércoles declaración a los más de cuarentena imputados en esta causa.

El nigeriano Uche milita actualmente en el Villarreal, mientras que Paredes, que antes de entrar en la sala afirmó que se encontraba tranquilo, es jugador del Albacete.

Este miércoles deberían declarar Ivan Obradovic y Adam Pinter, también jugadores del Zaragoza en aquella temporada, pero fuentes jurídicas explicaron a EFE que el primero pidió un aplazamiento al estar concentrado con la selección serbia, mientras que el segundo no ha sido localizado y se seguirá el procedimiento habitual para que declare.

También debería haberlo hecho un representante designado por el Real Zaragoza, club que está imputado como persona jurídica en la causa, pero que alegó una reunión para comparecer más adelante.

La Fiscalía Anticorrupción se querelló contra los integrantes de ambas plantillas así como contra algunos dirigentes del Zaragoza y contra el propio club aragonés, al que acusó de sobornar a los jugadores del Levante para obtener un triunfo que le permitió eludir el descenso a Segunda División en esa campaña 2010-11.

El 2 de octubre de 2014 exjugadores de los dos equipos, así como el expresidente del club aragonés, Agapito Iglesias, acudieron a la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada en Madrid para ser interrogados.

Posteriormente, el 18 de diciembre se informó de que el juzgado de instrucción número 8 de Valencia iba a decidir sobre la querella presentada por la Fiscalía Anticorrupción ante el juzgado decano de Valencia contra 42 implicados, la mayoría de ellos futbolistas que jugaron el 21 de mayo de 2011 aquel partido presuntamente amañado.

Admitida a trámite la querella, las declaraciones debían haber comenzado en febrero de este año pero se pospusieron al no haber sido localizados algunos de los implicados en el caso.

Casi ninguno de los futbolistas afectados juega actualmente en el Levante o en el Zaragoza, varios se han retirado del fútbol, alguno juega en el extranjero y la mayoría de los implicados que no eran españoles ya no residen en este país.

Agapito Iglesias y Javier Aguirre, el viernes

Entre los imputados están el Real Zaragoza, su expresidente Agapito Iglesias, el mexicano Javier Aguirre, ambos citados para declara este viernes.

Inicialmente el fiscal argumentó que los jugadores del Zaragoza dieron 965.000 euros a los futbolistas del Levante para que se dejaran ganar en aquel partido.

Si la jueza, una vez finalizada la instrucción, no decide dictar el archivo del caso y abre auto de procedimiento abreviado, la fiscalía podría solicitar penas que según el Código Penal podría incluir multas económicas, la inhabilitación de los implicados e incluso la cárcel.