La etapa de Amadeo Salvo al frente del Valencia ya ha finalizado. También la de la actual dirección deportiva. Hoy, salvo cambio de planes, se escenificará el adiós. A lo largo del día, la decisión fue tomando forma y fue, al atardecer, cuando los protagonistas se citaron en el club y allí se puso en evidencia lo que hasta el momento era un secreto a voces. Dejan el Valencia CF.

En una batalla de poder interno con el técnico, Nuno Espírito Santo ha recibido por parte de Peter Lim toda la potestad en el área deportiva, situación que ha sido el detonante para la salida de Rufete, y con él de Amadeo Salvo. Tras el cara a cara del pasado 23 de junio entre Layhoon Chan y el Mánager General saliente, éste quedó apartado de todas sus funciones, a la espera de una reestructuración interna que se ha iniciado. Rufete ha madurado su decisión los últimos días al lado de su familia, y por la mañana se lo hizo saber al presidente ejecutivo unas horas después de decírselo a su gente de confianza. No aguantaba más, y Amadeo Salvo, que apostó desde el primer día por él „primero para implantar el modelo actual de La Academia y luego como máximo responsable de la parcela deportiva„, le acompaña en su adiós.

Anoche se ultimaron los finiquitos de cada uno de ellos, también los de los colaboradores más cercanos a Rufete (Roberto Fabián Ayala y Joan Salvans), que tenían un año más de contrato. El ya ex Mánager General Deportivo tenía contrato hasta junio de 2017. Amadeo Salvo, tras valorar desde la distancia la "jugada" de Nuno escenificando quién mandaba el pasado 12 de junio, cuando el Sao Paulo informó de la transacción de Rodrigo Caio al Valencia CF a expensas de un reconocimiento médico que no superó, estaba más tranquilo. Se enfadó muchísimo ese viernes día 12, pero con el paso de las horas se relajó y aunque se le había pasado por la cabeza decir adiós, esa fuerza había menguado.

Hasta la conversación que tuvo por la mañana con Rufete. Sobre las 11 horas, Salvo y el aún Mánager General Deportivo se reunieron en el kiosco-bar La Pérgola (encuentro desvelado por Marca) y allí diseñaron el cómo dar forma al adiós. No tener esa cita en las oficinas de la entidad era significativo, pero tampoco se escondieron.

Mientras, en el club, Layhoon Chan y Kim Koh seguían trabajando en la cuarta planta. A las tres del mediodía, el duo salía con paso ligero para comer en una cafetería cercana a la sede. "Si hay cambios informaremos", apuntaba la presidenta mientras el Consejero remitía a una "conferencia de prensa si tenemos que comunicar algo". Ahí ya había conversado con Amadeo Salvo, que les comunicó su malestar con la situación y les invitaba a encontrar una solución cuanto antes. Su reacción fue convocar una reunión para la tarde en las oficinas de la entidad.

El presidente ejecutivo Amadeo Salvo llegó al club a las 18.30 horas y, acto seguido, fueron acudiendo a la sede los miembros del consejo asesor Gil de Pareja, Salvador Belda, José Luis Zaragosi y Salvador Martínez. En los cuatro casos, los rostros eran de preocupación. A las 19.05 y en un vehículo deportivo negro, aparecía el mánager general Francisco J. Rufete junto a sus colaboradores más directos, Roberto Fabián Ayala y Joan Salvans. Todos ellos, y en la cuarta planta, se reunieron con la presidenta Layhoon Chan y el consejero Kim Koh. Precisamente este último era el primero en abandonar el edificio de Micer Mascó a las 20.20 horas. Y lo hacía muy sonriente. Auxiliadora Borja, ex secretaria del consejo, llegaba al club a las 21.05. Media hora después,los asesores del consejo así como la directora financiera Inma Ibáñez abandonaban la sede. Pero los cargos "salientes" seguían dentro, aunque ya negociando su salida de la entidad blanquinegra. Prolongar su continuidad era un sinsentido y sólo faltaba encontrar una fórmula que agradara a todas las partes.

A las 00 horas finalizaba la reunión que se llevó a cabo en su despacho de la cuarta planta sin permitir que nadie entrara. Así se lo hizo saber incluso a los miembros de seguridad que pernoctan en el edificio. Pero cuando no circulaban vehículos, llegaban a escucharse gritos del presidente ejecutivo. También había abogados presentes resolviendo los contratos. La tensión no era agradable, más cuando sólo ocho meses después de concretar la venta de la mayoría accionarial tanto con la Fundación del Valencia CF como de Bankia, finalizaba su etapa. La persona que más trabajó para que el empresario singapurés adquiriera la mayoría accionarial del club „al considerar él que era la mejor oferta, así como los patronos de la Fundación y la firma consultora„, sale por la puerta de atrás, de madrugada y sin haber podido certificar con la clasificación para la Champions la primera temporada de la "Era Lim".

El "caso Rodrigo Caio" „ayer firmó un contrato de cesión con el Atlético de Madrid„ es lo que ha acelerado y hecho más visibles las enemistades. Las desavenencias entre la actual dirección y la propiedad se habían agudizado en los últimos meses, sobre todo, por el desacuerdo en el área deportiva. Amadeo Salvo, cuando se negociaba la llegada de Imbula,conoció por el Sao Paulo el traspaso del brasileño al Valencia. Y esa misma noche, molesto con el proceder de la propiedad, el presidente ejecutivo empezó a dar vueltas a su dimisión. También Rufete y su equipo. Un detalle: Esa misma noche Rufete telefoneó a Ayala que se encontraba de vacaciones en Rosario (Argentina) para anunciarle su decisión y el argentino decidió tomar un vuelo rumbo a Valencia donde llegó a primera hora de la tarde.

Sólo faltaba formalizar su salida y es una situación que se iba a cerró en la noche de ayer. Con rostros serios y sin querer valorar lo ocurrido, los protagonistas de la etapa de Amadeo Salvo abandonaban la sede del club.