El alero Harrison Barnes, de Golden State Warriors, campeón de la NBA, concedió ayer una rueda de prensa en el hotel Vincci Posada del Patio de Málaga con motivo de su visita al Campus WOB Basket4US 2015, del que es padrino. El norteamericano aterrizó el pasado martes en el aeropuerto de la capital costasoleña y escasas han sido las horas en las que Harrison Barnes no ha tenido un balón de baloncesto entre sus manos. O en las que no ha compartido cancha y sonrisas con los 500 «campers» que desde el domingo se dan cita en el Colegio Los Olivos. Ni el jetlag, ni el extenuante calor que «derrite» estos días la ciudad, le quitan las ganas de aprovechar al 100% esta experiencia.

«Desde que surgió la posibilidad de venir a Málaga, hasta el día de hoy, ha pasado muy poco tiempo; eso me ha permitido enchufarme rápido y exprimir al máximo estas jornadas en el campus. El martes fue un día tan intenso que, pese a la diferencia horaria, pude descansar perfectamente». Barnes destacó sobre todo en nivel de los jóvenes jugadores. «Me ha sorprendido el nivel y habilidad de los campers», admitió.