Sin su buque insignia, Mireia Belmonte, lesionada y con la mirada puesta absolutamente en los Juegos de Río de Janeiro, el equipo español presente en Kazán tiene escasas opciones de éxito más allá de conseguir nadadores en finales. Belmonte, que se colgó tres medallas en Barcelona (dos platas y un bronce), no competirá a causa de sendas lesiones en los hombros que incluso podrían haber puesto en peligro su preparación olímpica.

Algo similar le pasa a la mijeña Duane da Rocha. Campeona de Europa en los 200 espalda en 2014, una operación de apendicitis le ha supuesto un problema para preparar este Mundial y le hace estar muy lejos de su mejor forma y de las marcas necesarias para optar al podio.

Melani Costa no aparece tampoco entre las favoritas, pero la competitividad de Costa le sitúan con opciones, al menos, de ser finalista en los 200 y los 400 libres. Las otras dos opciones para nadar finales son las de Judit Ignacio (100 y 200 mariposa) y Jessica Vall (100 y 200 braza).

En hombres, las mejores opciones pasan por el espaldista Miguel Ortiz-Cañavate, séptima mejor marca mundial del año en 50 espalda; y Rafa Muñoz, sexto en el ránking mundial de los 50 mariposa.

En esta primera jornada debutarán Judit Ignacio en las series de los 100 mariposa; Miguel Durán (400 libre), Rafa Muñoz (50 mariposa) y Melani Costa (400 libre).