El piloto español Fernando Alonso (McLaren) ha reivindicado que "los mensajes de radio deberían ser privados" en la Fórmula 1, después de que se escucharan sus duras críticas al equipo durante el Gran Premio de Japón, unas palabras que ha atribuido a la "lógica frustración" de no poder pelear por un resultado mejor, al tiempo que ha reiterado su voluntad de cumplir íntegro su contrato que expira al final de 2017.

Durante la carrera celebrada hace dos semanas en Suzuka, la realización televisiva 'pinchó' la radio de Alonso y se pudo escuchar claramente al piloto ovetense calificando de "vergonzoso" a su coche, del que dijo que parecía ir propulsado por un motor de GP2.

"Es por la frustración de luchar duro en mitad de una batalla, darlo todo en un coche y ver que te pasan fácilmente en las rectas. Pero estoy contento de lo que sacamos en Suzuka. Si se escucharán mis mensajes de radio en otras carreras, o los de Jenson (Button), todavía resultarían más sorprendentes", apuntó Alonso con una sonrisa durante la rueda de prensa de pilotos previa al Gran Premio de Rusia.

El bicampeón mundial recordó que "durante toda la temporada" en su equipo han "sido muy positivos a pesar de estar viviendo tiempos difíciles", añadiendo que "lo que se habla por radio debería ser privado porque estás hablando con tu equipo, no con el público".

"Creo que es normal y comprensible mi frustración y la de Jenson por nuestro compromiso con el equipo, ya que estás luchando a tope y no puedes evitar perder posiciones. En otros deportes como el fútbol no se escucha lo que dicen los jugadores durante los partidos, pero aquí es normal. Solo estaba hablando con mi equipo y la frustración es comprensible", reiteró.

En este sentido, Alonso aclaró que "lo más importante en Suzuka pasó el miércoles" anterior al carrera, cuando tanto él como el resto de componentes del equipo McLaren visitaron las instalaciones de Honda en Sakura.

"Vimos el programa de motor para el año que viene y repasamos todas las dificultades y posibles soluciones para 2016. Esas largas reuniones fueron mucho más importantes que la carrera del domingo, cuando no pasó nada nuevo porque sabemos los problemas que tenemos", lamentó.

Además, Alonso volvió a confirmar que piensa cumplir íntegros los dos años de contrato que le restan con McLaren y apuntó que en las cinco carreras que faltan para acabar el Mundial se volverá a "ver más o menos lo mismo" en cuanto al rendimiento de su MP4-30.

"Seguiremos trabajando recopilando información del coche y pensando en la puesta a punto para el año que viene. Hay cosas que nos gustaría probar y también ayudar a Honda a desarrollar la unidad de potencia. Hemos tenido altibajos esta temporada, pero en las dos últimas carreras hemos logrados ser más competitivos, así que esperamos seguir en esa dirección. Hacerlo mejor no era difícil porque empezamos el año muy abajo. Parece que estamos haciendo algunos progresos", analizó.