El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, confirmó que han ordenado una auditoría en la Federación Española de Baloncesto tras conocer que podría existir "posibles prácticas corruptas" y que el organismo que dirige José Luis Sáez les debe remitir "en el plazo más corto" de tiempo posibles sus alegaciones.

El diario 'El Mundo' publica este jueves que el CSD ha ordenado la realización de una auditoría complementaria a los gastos de la FEB tras recibir una denuncia que alerta del supuesto uso indebido de fondos federativos por parte de José Luis Sáez, una práctica que el diario indica que "se habría mantenido durante años".

En este sentido, Cardenal aseguró que están "haciendo exactamente lo mismo" que en otros casos similares. "Hemos requerido inmediatamente al denunciante, cuando hemos tenido noticia de posibles prácticas corruptas, toda la documentación, y cuando hemos tenido todos los elementos de juicio, hemos ordenado las actuaciones de comprobación como la celebración de esa auditoría", afirmó tras inaugurar una jornada científica 'de la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte(AEPSAD)

El dirigente apeló a "llamar a la tranquilidad" y a que "los sucesos vayan aconteciendo". "Pero con la seguridad de que el CSD está actuando con la firmeza conocida en estos casos y la celeridad que la materia requiere", advirtió.

Además, indicó que, "por supuesto", ha hablado ya con José Luis Sáez para "pedir explicaciones" pertinentes y "conocer los detalles". "Les hemos invitado que el plazo más corto de tiempo posible remitan sus alegaciones y podamos instruir el expediente", añadió.

"Desde aquí quiero mandar un mensaje de confianza a los ciudadanos y aficionados del deporte que son conscientes de que el compromiso del CSD con la buena gobernanza no admite la más mínima excepción y que ya hemos acreditado ya un cambio radical en este punto, una tolerancia cero", apuntó Cardenal.

El presidente del CSD recordó que esta actitud le ha costado "un poderoso enfrentamiento con la federación más fuerte", en relación a la RFEF, con la que está viviendo "un enfrentamiento que incluso ha comportado una huelga en una jornada electoral". "Y no hemos dado marcha atrás ni cambiado un ápice nuestro rumbo en esta materia", avisó.

"He sufrido acusaciones muy graves del COE de injerencias en el deporte tratando de proteger a federaciones que estaban siendo investigadas y a las que se estaba exigiendo claridad en sus cuentas y en el uso del dinero público y que cumplan con estándares de buena gobernanza lejos de cualquier práctica de corrupción", sentenció.