Los seis equipos que disputan la Liga Femenina +35 de Málaga quieren ser Basket Lovers. El famoso concurso que organizan la ACB y Endesa tiene desde ayer un participante malagueño, que aspira a seguir los pasos del Ciudad de Melilla. El club de la ciudad fue el último ganador del concurso y pudo invertir los 6.000 euros del premio en poner focos para alumbrar el colegio y poder entrenar cuando cae la noche. Ahora el reto es para la Liga Femenina que disputan en Málaga seis equipos, cuyas jugadoras deben cumplir un único requisito: tener 35 o más años para poder jugar.

Los seis equipos se han apuntado a la aventura de ser el mejor proyecto de los cinco que se han presentado en esta edición de Basket Lovers. Los clubes necesitan votos para poder ganar el premio de 6.000 euros, que destinarán a costear seguros médicos y federativos, además de equipaciones, chándales y otro tipo de material, según explicó ayer a este periódico May Bandrés, una de las organizadoras de la Liga.

El caso de las chicas salió ayer al mediodía a la palestra, como quinto y último participante de este año en el concurso que organizan la ACB y Endesa, y que vuelve a ser toda una inspiración, ya que es el único caso de básket femenino que se ha presentado al concurso, con la peculiaridad de que se trata de seis equipos cuyas participantes tienen ya más de 35 años.

Para que la historia gane debe conseguir el mayor número de visionados y el mayor número de 'likes' en la fan page Endesa Basket Lover en Facebook. Se podrá compartir hasta el 10 de junio, fecha en la que conoceremos al ganador de los 6.000 euros.

El padrino de las chicas es el jugador del Unicaja, Dani Díez. El alero ha presentado públicamente cuáles son las peculiaridades de la Liga Femenina +35 de Málaga, que reúne a más de medio centenar de mujeres en las pistas que la Delegación Malagueña de la Federación Andaluza posee en Teatinos. Ahora hay que apoyar su candidatura, viendo el vídeo y votándolo.

En la página de Facebook donde hay que votar el proyecto malagueño, la organización hace especial hincapié en la curiosidad que supone que los partidos de los equipos estén llenos de niños. Pero no jugando el partido, sino en en la grada o en banquillo, ya que acuden a las pistas de la Federación en Teatinos con sus madres, que son las protagonistas. "En esta ocasión, son los niños quienes llevan a sus madres a jugar al baloncesto y no al contrario. ¡Una grada llena de familiares apoyando a estas grandes jugadoras!", dice la página Endesa Basket Lover.