­Manuel Rincón Granados es un empresario de éxito. Un hombre hecho a sí mismo que ha edificado de la nada un pequeño imperio: «Clínicas Rincón». Hace tiempo que Manolo comprendió que el apoyo al deporte «te devuelve el triple de lo que tú le das». Y comenzó, desde que apenas tenía un par de clínicas en Torre del Mar, el apoyo a equipos de fútbol, balonmano o baloncesto de la comarca de la Axarquía, masculinos y femeninos. Ahora, Rincón, el «mecenas» del deporte malagueño, trama su salto a la primera escena del deporte nacional. Quiere ser el presidente de la Federación Española de Baloncesto. Éstos son su argumentos.

¿Cómo nace la idea de presidir la Federación Española de Baloncesto?

Mi hijo Lolo ha disputado la Titan Desert y le prometí que iba a ir a apoyarle. Allí en Marruecos he tenido unos días de reflexión y tranquilidad. Y todo surgió cuando me llaman y me dicen que el presidente del Burgos ha decidido dar un paso al frente y presentarse a la presidencia de la Federación Española de Baloncesto. Inmediatamente, yo le llamo y le doy mi enhorabuena. Es un orgullo que un equipo, que un presidente de un club de LEB pueda llegar ahí. Él ha ganado la Liga dos o tres veces y no ha subido. Y comienzo a darme cuenta de la cantidad de problemas que tiene el baloncesto español. Urge mejorar la relación con la ACB, porque eso es muy importante, es fundamental. Debemos tener una relación de apoyo total, no de enfrentamiento. Y me digo a mí mismo, ¿por qué no una candidatura que yo pueda encabezar?

¿Se da cuenta del lío en el que se ha embarcado?

Estoy en un proceso de mi vida en el que puedo tener más tiempo libre y no dedicárselo tanto a mis empresas. Voy a dejar un poco mis empresas de lado. Tengo ya 64 años y, después de todo, me lo puedo permitir. Tenemos un grupo de gente muy sana, muy comprometida, que conoce este mundo. Yo, después de 14 años presidiendo el Clínicas Rincón, un club que estaba en Liga EBA y que ha militado muchos años en LEB Oro, sigo sin entender bien el baloncesto. Aún me cuesta entender bien qué son los pasos… (risas). Pero sé de gestión. De gestión empresarial y de grupos humanos. Y vamos a rodearnos de un grupo que puede llegar a lo más alto.

¿Hay algo de rabia detrás de todo esto, de impotencia, de revancha?

No, no es eso… Pero es que en todos estos años hemos sido cruelmente maltratados. La Federación, no digo todo el estamento, pero sí una parte de él, ha perdido el alma, la esencia. No ya porque se ha convertido en un organismo meramente recaudador, sino porque hemos sido maltratados. Como bien sabes jugábamos en Carranque, había que tener dos marcadores obligatoriamente, pero la instalación sólo tenía uno. Con ingenio y dificultad, pusimos una cámara y se reflejaba el otro marcador, se veía perfectamente. Y, sin embargo, todos los partidos nos multaban. Esa falta de alma hay que restituirla, urgentemente. Hay gente en la Federación que no tiene ni idea de lo que cuesta sacar un equipo, de los esfuerzos que hay que hacer. Y eso tiene que acabar, hay que poner más facilidades, tender puentes de entendimiento.

Lleva ya casi 15 años como presidente de un club importante en el baloncesto español…

Llevo 14 años como presidente del Instituto de Fertilidad Clínicas Rincón, con el entendimiento y el apoyo de Unicaja, por supuesto. Conozco los problemas del baloncesto. Y, como aficionado, me gustaría poder ver todos los partidos de la LEB. No cuesta nada tener una cámara y un locutor, y emitirlo con una calidad digna. Es algo que nos compete a todos. Es una tontería, pero los pequeños detalles son los importantes. El aficionado es lo primero.

¿Qué puede mejorar de la etapa de José Luis Sáez?

Se puede mejorar el baloncesto español. El presidente saliente ha hecho una magnífica labor. Tengo gente cercana en el baloncesto que me puede ayudar, vamos a formar un gran equipo. Paco Aurioles ha sido jugador de ACB, ha sido entrenador ayudante de Sergio Scariolo en la mejor etapa del Unicaja, ha sido y es entrenador. Conoce bien todo el mundo. No tiene el nombre de Jorge Garbajosa, que es un excepcional amigo y lo ha sido todo... Nosotros lo vivimos desde abajo, tenemos que ser la candidatura del baloncesto malagueño y del baloncesto andaluz.

¿Se ve como presidente?

Soy una persona de impulsos. Y viendo esta situación, tanteando el tema, ¿por qué no un malagueño puede ser presidente de la Federación? De baloncesto no sé mucho, sé de gestión y ponerle alma a lo que emprendo. A mi edad me siento joven. Tengo la experiencia necesaria para poder hacerlo, y el grupo adecuado. Si fuese presidente... Hemos criado a grandes jugadores en el Clínicas. Me acuerdo de Álex Abrines, de Kuzmic… jugadores del Unicaja que han ido para arriba. Y hemos recuperado a otros. Fíjate Jon Cortaberría, Alfonso Sánchez… Tenía fe ciega en ellos y lo han logrado. Málaga es una ciudad de baloncesto. Desde Málaga y Andalucía podemos hacer mucho. Y necesito el apoyo de todos, también del baloncesto femenino, al que también ayudamos desde Instituto de Fertilidad. He demostrado que soy un ave rara, pero, ¿por qué no mi equipo puede hacerlo realidad?

¿Tiene ya contactos, ha recabado apoyos y avales?

En el descanso del Unicaja-Real Madrid le comenté al presidente del Unicaja, y a Juan Carlos Sánchez, el responsable de la sección del Real Madrid, mi idea y los dos me apoyaron. Esta misma mañana (el miércoles) a primera hora he podido hablar con Eduardo García y me ha transmitido todo el apoyo del club, del Unicaja, que es mucho. Me han llamado de Cáceres, de Ávila... ahora hay que hablar con tantos amigos que me he ido encontrando en el camino y a los que voy a pedir que nos apoyen.