­El entrenador del Marbella FC, Mehdi Nafti, que deberá cumplir aún otros seis partidos más de sanción tras ser castigado de nuevo por el Comité de Competición, asume su responsabilidad, pero tiró a dar en su comparecencia de ayer, en la previa de esta nuevo jornada liguera, en la que el equipo visitará mañana domingo al Granada B. Nafti ya había sido castigado con cuatro partidos por «amenazas», según el acta arbitral y el Comité de Competición de la Federación, y cuando ya había cumplido dos ahora ha vuelto a ser sancionado con otros seis. El motivo, dar instrucciones desde la banda e ir al vestuario en el descanso.

El entrenador tunecino de origen francés asumió su responsabilidad en este asunto y explicó: «El principal culpable soy yo», reiteró en varias ocasiones. «Hay que aprender para que no vuelva a pasar, yo soy el responsable, por supuesto, aunque me habría gustado una llamada avisándome», dijo, sobre su última sanción. «Es algo que hacen todos... ya falta que me metan en la cárcel, que no pueda ver a mi niña. Me imagino que estoy molestando, que el equipo lo está haciendo bien, prosiguió.

«Hay que hacer autocrítica, el principal culpable soy yo, pero me parece excesivo», insistió el técnico del líder del Grupo IV de Segunda B. «Son ocho partidos de sanción, se me impide hacer mi trabajo. Yo no digo que no me haya equivocado pero esta sanción...», se lamentó Nafti. «Me imagino que estoy molestando. Hace dos meses estaba sacándome el carnet y el equipo lo está haciendo bien», remató.

El Marbella FC se mide mañana domingo al Granada B (12:00 horas) en la Ciudad Deportiva nazarí. La principal novedad en la convocatoria será la entrada de Javier Añón, «que ha entrenado a buen ritmo y está bien», dijo Nafti. El técnico no podrá contar con Lolo González, operado esta misma semana, y baja durante un mes.

«Michele es duda por un golpe en el pie y hasta el último momento no sabemos si estará disponible para viajar», dijo el francés, que habló maravillas del filial del Granada. «Es un un equipo alegre, rápido y que ataca con muchísima gente, muy físico. Lo que más me preocupa de un filial es que nunca tienen miedo a perder, son gente que compiten y tienen esa alegría y entusiasmo», apuntó Nafti.

«Tenemos que extremar las vigilancias y estar muy atentos a balón parado, ellos nos van a exigir mucho en lo físico. Son muy rápidos, especialmente en las transiciones ofensivas, donde atacan con muchos futbolistas», explicó el técnico franco-tunecino.