Hablar de Alexis Martín-Tamayo (1973, Badajoz) dentro del mundo del deporte en general y del fútbol en particular es casi como nombrar a un desconocido. Pero si a este extremeño se le menta no por el nombre que aparece en su DNI, sino por su apodo, «Míster Chip», todo cambia. Es el pseudónimo que un día el periodista Javier Ares puso a un apasionado de las estadísticas, un ingeniero en Telecomunicaciones que desde prácticamente la adolescencia recopilaba a mano todos aquellos datos numéricos que pudieran acaecer en un partido. Ahora, el personaje ha devorado a la persona y Míster Chip se ha convertido en un icono de las cifras deportivas, sobre todo a través de la red social Twitter.

Y no solo dentro del deporte español, sino que su facilidad y rapidez para aportar el más rebuscado de los datos ha trascendido de manera abrumadora a otros países, especialmente a Sudamérica, donde es prácticamente venerado.

El colaborador de Onda Cero repasa su trayectoria. Desde sus orígenes, la transición para convertirse a Míster Chip, el fenómeno de popularidad con el que convive en la actualidad, e incluso sus planes de futuro.

¿Quién es ´Míster Chip´?. A la hora de presentarse, Alexis Martín-Tamayo se define como «ingeniero de Telecomunicaciones al que le gusta mucho el fútbol y el deporte en general, y que un día aprovechó la oportunidad de cambiar su profesión por su hobby», señala este pacense al que Javier Ares rebautizó hace unos años. «Vio que la mejor forma de vender el tipo de trabajo que yo hacía era por medio de un personaje, y me puso ese. No participé en la decisión, pero lo acepté y hasta le estoy agradecido porque ha cuajado», comenta este colaborador periodístico cuyo nombre de pila ha pasado casi a un segundo plano, incluso en su vida diaria.

Paso al frente

Si bien desde mediados de los 90 Alexis ya le dedicaba un buen puñado de horas a hacerse sus propias estadísticas, no fue hasta «después del Mundial de Sudáfrica» en 2010 cuando decidió «dar un paso al frente». Allí, ya como integrante de Onda Cero, comprobó como «cada día acudían de cuatro o cinco medios de otros países, Colombia, México, Argentina y hasta Japón, para ver quién era el chaval ese que publicaba las estadísticas. Vi que este tipo de cosas que hacía gustaban a la gente y eran útiles. Ahí comprendí que tenía que dar un paso más porque aquello tenía buena pinta». Es por eso que solo aguantó «un año más trabajando en Telefónica» antes de hacerse profesional de la materia.

Lo que para cualquiera podía haber supuesto una responsabilidad extra, para Alexis no supuso el más mínimo trauma. «Mis datos los tenía profesionalizados, pero no los explotaba; era como si los guardara en el anonimato y solo como entretenimiento personal. Por eso la transición de una etapa a la otra fue sencilla porque ya lo tenía todo montado», apunta, para dejar claro que en esta estructura fueron claves sus estudios. «Creo que de no ser ingeniero de Teleco habría sido imposible llevar esta base de datos. Gracias a mis estudios he tenido la facilidad para programar, para manejar ordenadores y para usar y estructurar bases de datos. Y ahí, en la componente informática, es donde creo que está la diferencia entre los periodistas que se dedican a esto de siempre y tienen mucha información almacenada, y yo, que he convertido todos mis papeles para luego saber extraerle el jugo».

El de Míster Chip es un trabajo sin casi resuello. «Hay que ver mucho fútbol y apuntar todo lo que pasa», comenta sobre una labor a la que «hay que dedicarle tiempo todos los días porque este deporte no se detiene nunca. Ahora ha parado unas semanas en España pero por ejemplo sigue en Inglaterra», explica Alexis, que además debe atender también lo que sucede «en la Euroliga, la Eurocup, la NBA€ hay que verlo todo».

Y precisamente la pregunta del millón, con todo lo que abarca este amante de las estadísticas, es si realmente le dan las 24 horas del día para tenerlo todo bajo su control. «Sí te da tiempo», responde con rotundidad. «Los partidos de fútbol sí los veo todos, pero a cámara rápida y paro en el momento que me interesa, con una falta, un gol, una tarjeta€», habla Alexis sobre uno de sus trucos para dejar algo de espacio a su vida privada. «Hombre, claro que tengo vida», vuelve a aseverar. «Tengo mi mujer, mi hija, mi familia, mis amigos, y me gusta estar con ellos. Lo importante es tenerlo todo bien organizado y aunque sea mejorable, mi organización es bastante buena. Así te da tiempo de hacerlo todo», apunta al respecto.

Lejos de dejar en manos de otros la actualización y ampliación de sus datos estadísticos, Míster Chip revela que lo coteja absolutamente todo de primera mano. «Los partidos de fútbol los tengo que ver porque las estadísticas que salen en otros medios que se dedican a eso no me acaban de convencer del todo, y yo llevo más de 20 años con mis propios criterios».

Ni el propio Alexis Martín-Tamayo es capaz de cuantificar el volumen de su base de datos. «Almaceno la historia del fútbol y de todos los deportes olímpicos. Siempre dependiendo del tipo de competición, no almaceno el mismo nivel de detalle de la liga de Finlandia que la española, la francesa, la alemana, la inglesa, o la italiana€ Tengo información de todo, pero no con el mismo nivel de detalle», explica. Un tesoro por el que ya le han llegado algunas oferta de compra, pero no lo suficientemente tentadoras. «No tengo intención de venderla, ya que es un trabajo en el que he invertido toda mi vida».

Para Míster Chip uno de los factores más determinantes de su labor es «la rapidez». «Cuando estás trabajando en la radio o en la tele durante un partido en directo, el fútbol no espera. No puedes dar los datos dos horas después de que acabe, sino en el momento. O tienes la consulta a mano para darla inmediatamente o no vale de nada», cuenta..

Odia los plagios

Los datos que hace públicos Míster Chip, especialmente en Twitter, quedan a disposición del público en general, por lo que no es raro que otros medios se hagan eco de ellos... y sin citar la fuente. «Eso es feo porque al final se trata de tu trabajo. No me sienta bien que alguien tome tu información y la utilice como si fuera propia. Yo intento ser respetuoso con el trabajo de los demás y si uso alguna información de otro compañero me gusta que se le reconozca su trabajo», comenta Alexis.

Cuando se le pregunta a Míster Chip por qué competición o liga guarda una mayor querencia dentro de su tarea estadística, su respuesta es tajante. «El Mundial de fútbol es lo que más, es una competición que me apasiona, la que tengo con mayor nivel de detalle desde pequeñito y a la que trato con más cariño», explica sobre un sentimiento que hace extensivo a «todos los torneos de selecciones porque ahí es donde está el fútbol de verdad». «En el de clubes hay mucho mercantilismo y mucho negocio. La mayoría de jugadores no están en los clubes por sentimiento pese a que al final se sientan muy identificados con su equipo. Es el dinero el que te mueve. Pero en las selecciones eso no es así, es un fútbol en el que defiendes unos colores sin importarte si vas a ganar más o menos. Es volver a los orígenes€ Me pone mucho más una final de un Mundial que una final de Champions», añade en este sentido.

Con 43 años y en plena efervescencia mediática, Alexis no se para a mirar lo que le deparará el futuro, si bien no cierra puertas a nada.