El CD UMA Antequera terminó de soñar con su regreso a Primera División de la forma más cruel, en el duelo definitivo de la semifinal del play off y respaldados por un Pabellón Fernando Argüelles que registró una fantástica entrada. La afición respondió una vez más a la llamada de su equipo para seguir soñando.

Dos pequeños detalles frustraron el encuentro de los chicos de Manuel Luiggi «Moli». Rubi marcó el 0-1 nada más empezar el segundo tiempo tras aprovecharse de un robo en primera línea de presión y Miguel puso la sentencia en un fallo defensivo al sacar el balón jugado desde atrás. La confianza del conjunto gallego se vio reforzada con los dos goles. La defensa aumentó en intensidad y atención, cerró todos los huecos e Illi destacó bajo palos. Ocasiones no le faltaron a los locales para marcar, pero la falta de puntería en momentos decisivos pesó demasiado.

El UMA afrontó el episodio final de la eliminatoria con ausencias muy importantes. Miguel Fernández, tras la expulsión del pasado viernes, no pudo ser de la partida y Claudio Da Silva sufrió una rotura en el abductor en el segundo encuentro. Tete, una pieza esencial en ataque y defensa, entró en la convocatoria, aunque muy mermado por problemas musculares. Sin estos tres jugadores, el resto de compañeros dieron un paso al frente.

Coco asumió muchas responsabilidades ofensivas. Desbordó una y otra vez a su marcador por ambos perfiles. Forzó muchos lanzamientos a los que respondió siempre Illi. La conexión del «7» con Juanillo fue esencial. El pívot cordobés generó incertidumbre en la defensa visitante con su habilidad en el juego de espaldas. El peso del choque recayó en el plantel local. Diego Ríos planteó un entramado defensivo infranqueable y, en la transición al ataque, apostó por el juego directo. Chicha se desenvolvió a la perfección en ese escenario. Bajó los balones que le mandó el portero e hizo trabajar a Conejo.

En cada uno de los duelos saltaron chispas. Ninguno de los protagonistas rehuyó al contacto y pelearon por cada balón dividido. Mientras O Parrulo se resguardó en la lectura de juego de un inconmensurable Isma, Juanra y Crispi se estrellaron con un muro llamado Illi. El cierre cordobés lo intentó por medio de disparos lejanos y el malagueño culminó una brillante jugada colectiva. La igualdad perduró durante los primeros veinte minutos. Los porteros de ambos equipos evitaron situaciones de gol claras. El meta gallego sacó un pie providencial a tiro de Óscar antes del descanso. A la vuelta de los vestuarios, el partido cogió un rumbo nada positivo para los de Moli.

Rubi, como ya hizo en el segundo choque, abrió el marcador al contragolpe. Juanillo perdió el cuero cuando cruzaba el círculo central. El «11» gallego no falló ante Conejo. El CD UMA Antequera buscó con insistencia el empate. Acumuló los mejores minutos de juego gracias a una circulación de pelota rápida que generó un resquicio en la zaga visitante. Óscar se topó con las paradas definitivas de Illi y Coco consiguió sacar remates de mucho peligro. Fue ajustando poco a poco el punto de mira. En el mejor momento local, un error defensivo puso la puntilla. Miguel, en el 29´ aprovechó una imprecisión en la salida de pelota para anotar el 0-2.

Justo en la siguiente acción, el cuadro dirigido por Moli pudo cambiar el rumbo del partido. Illi derribó en el área a Óscar y el árbitro señaló una pena máxima muy clara. Coco asumió la responsabilidad del lanzamiento. El pívot malagueño disparó con fuerza, empujado también por todo el público, y se encontró la intervención del guardameta visitante. Desde ese instante, el reloj corrió en contra de las aspiraciones del conjunto malagueño. Intentó reaccionar de todas las maneras, pero no consiguió un tanto que le diera confianza.

El triunfo cayó del lado ferrolano y, con él, el pase a la final del play off de ascenso a la máxima categoría. Una lástima.