El Villarreal, con una victoria solvente ante el Valencia en Mestalla (1-3), y la Real Sociedad, con un empate a dos en Balaídos que se consiguió en el último segundo, lograron las dos plazas que daban acceso directo a la Europa League, condenando al Athletic Club, derrotado en el Vicente Calderón, a la séptima.

La última jornada de la Liga tenía su primer punto de atención en la pelea por estar en la segunda competición continental, premios que fueron al final para el 'Submarino Amarillo', que se aseguró su quinta plaza gracias a una victoria en Mestalla frente al Valencia que se fraguó en la segunda mitad, y para el equipo guipuzcoano, al que salvó un tanto de Juanmi en el minuto 93 cuando estaba fuera.

En una tarde propicia también para las despedidas, ni Salvador González, 'Voro', ni Eduardo Berizzo consiguieron decir adiós a sus respectivas aficiones con victorias, aunque recibieron el cariño de estas.

En Mestalla, los de Fran Escribá empezaron el partido forma fulgurante, aprovechando la primera ocasión clara para batir a Jaume Domenech por mediación de Roberto Soldado, un ex del Valencia, que le servía para tranquilizar los ánimos.

El equipo de Voro se fue en busca del empate y asedió la portería de Andrés Fernández hasta el descanso sin encontrar el gol, frente a un rival que demostraba su buen hacer en facetas defensivas ante el paulatino crecimiento de los locales.

Pero tras el paso por las duchas, el portugués Nani premió la mejoría 'che' y logró el empate del Valencia en el minuto 54 con un certero cabezazo. Sin embargo, el equipo visitante no se vino abajo con el empate y Manu Trigueros, uno de sus mejores jugadores esta temporada, volvió a adelantar al Villarreal apenas cuatro minutos después.

En esta ocasión, el valenciano no tuvo una respuesta tan efectiva para buscar la igualada y el conjunto castellonense evitó agobios finales con una buena contra y el tanto de Nicola Sansone en el minuto 88.

La Real, con épica

Por su parte, en Balaídos, la Real Sociedad sufrió lo indecible para arañar un punto ante el Celta (2-2), que finalmente le sirvió para enviar al Athletic Club a la séptima plaza cuando los 'Leones', pese a su derrota en el Calderón, la creían ya garantizada.

El equipo de Eusebio Sacristán, con más en juego que su rival. Lo intentó con más ahínco durante la primera parte, pero no conseguía superar la meta 'celeste', bien resguardada de nuevo por Sergio Álvarez. Las mejores ocasiones fueron visitantes, pero la falta de puntería no premió su insistencia.

Además, quien golpeó primero fue el Celta, ya en la segunda parte y tras un penalti convertido por Iago Aspas en el minuto 54. El delantero le dedicó el tanto al 'Toto' Berizzo, que anunció este sábado que se marchará del club gallego, y anotó su gol 19, lo que le consagró como mejor goleador nacional.

El tanto permitió al equipo vigués controlar el encuentro ante la ansiedad de la Real. Sin embargo, Oyarzabal logró el empate para los de Eusebio, que se acercaban a una Europa League que pareció alejarse en unos últimos cinco minutos de infarto.

Así, Hjulsager volvió a adelantar a los locales con un gran disparo desde fuera del área y a complicarle Europa a los 'txuri-urdines', pero, ya en el descuento, tras un saque de esquina de Canales, Juanmi, futbolista que no destaca por su estatura, logró la épica para los visitantes cabeceando el 2-2 en el 93.

El Athletic cae en el adiós al Calderón

Un triunfo incontestable del Atlético de Madrid y dos goles de Fernando Torres despidieron este domingo con emoción, pasión y victoria (3-1) el estadio Vicente Calderón contra el Athletic Club, desbordado y doblegado desde el minuto 10 y con el objetivo europeo todavía pendiente de la final de la Copa del Rey.

Una inquietud para el conjunto bilbaíno, que no existió hasta el minuto 70, hasta que Iñaki Williams anotó el 2-1, de un partido que terminó 3-1, con el tanto del argentino Ángel Correa, y que ya antes había apuntado a goleada a favor del equipo madrileño, mejor siempre sobre el terreno de juego que su rival y en un campo que ya no pisará más, pero que permanecerá irreductible en el tiempo.

Este domingo fue su última tarde, de melancolía y emoción, en la despedida oficial de su casa durante el último medio siglo, durante 1.227 partidos oficiales, durante muchos duelos memorables, el escenario de la Copa Intercontinental, de dos Ligas, de inolvidables momentos y triunfos, de gestas, remontadas e incluso de decepciones que construyeron lo que hoy es y será siempre para toda su hinchada.