La 73ª edición de La Vuelta volverá a sorprender con una salida oficial innovadora, transgresora y llena de color. El Centre Pompidou de Málaga será el punto de partida de la primera etapa de La Vuelta 2018, que arrancará en la capital malagueña el sábado 25 de agosto y finalizará su recorrido el domingo 16 de septiembre en Madrid. Además, por primera vez en 9 años, la primera etapa será una contrarreloj individual, que culminará en la emblemática calle Larios, en el centro histórico de la ciudad.

El lugar elegido ayer para anunciar el punto exacto de partida de la ronda española 2018 fue el Centro Pompidou de París, donde el presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente del Centro Pompidou de París, Serge Lavignes, desvelaron la noticia junto al director de La Vuelta, Javier Guillén.

La primera etapa de La Vuelta 2018 será «la etapa de los museos»: un recorrido cultural e histórico por las calles más emblemáticas de Málaga, que permitirá mostrar al mundo la belleza y la riqueza cultural de la ciudad. «Un trazado estético y visual», dijo Francisco de la Torre, «que mostrará la Málaga del pasado y la del futuro», en una provincia «que se vuelca con el ciclismo y con La Vuelta», añadió el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, que transmitió su satisfacción por el hermanamiento de dos ciudades como París y Málaga, a través «del arte, la cultura y el deporte».

Guillén desveló que la primera etapa cambiará la costumbre de los últimos años y que, aún siendo contrarreloj, lo será en la modalidad individual y no por equipos, como venía siendo costumbre.

También avanzó que serán 10 kilómetros «muy urbanos» por la capital costasoleña con final en la calle Larios, por lo que los corredores esta vez no se encontrarán ni arena ni pavés, sino «mármol», que es lo distingue al suelo de ese icónico lugar.

Tras esa primera etapa, tres jornadas más con salida en la provincia de Málaga. La primera o la segunda de ellas casi seguro con final en Caminito del Rey, el bello paraje en el que se dio a conocer al gran público el colombiano Esteban Chaves en 2015. Y donde también el holandés Tom Dumoulin, vigente campeón del mundo contrarreloj y ganador del Giro 2017, demostró que domina las subidas de grandes desniveles. Hasta del 15 por ciento son algunos de los muros del Caminito en los cuatro últimos de sus 7,3 km al 5,5%.

La cuarta etapa, la última que sale de Málaga, terminará en otra provincia andaluza, que aún no se ha desvelado. A partir de ahí, la conocida -y exitosa- apuesta de La Vuelta y Guillén por finales en alto, que este año «serán entre ocho y diez». «Ya llevamos ocho y no creo que lleguemos a los diez», adelantó también en unas pequeñas «pinceladas» de la Vuelta 2018.

De esa decena de finales en alto, «dos serán inéditos» dentro de un recorrido «en progresión de menos a más» en cuanto a la dureza de los recorridos. Que alcanzarán su culmen en la tercera semana y, especialmente, en «la penúltima etapa», el sábado 15 de septiembre, «que será una gran jornada de montaña».

Ya el pasado mes de agosto, los responsables de la organización de la carrera anunciaron que Málaga será el punto de partida de la edición del año próximo, sumando así otro año más con protagonismo en el recorrido de La Vuelta, como en la pasada edición de 2017, cuando la provincia vivió dos días de paso del pelotón; o con la celebración de hasta cuatro etapas en 2015.