El presidente del Marbella FC, Alexander Grinberg, habló ayer tras su salida de prisión, la semana pasada. El máximo mandatario ruso agradeció «a los aficionados y ciudadanos de Marbella, el apoyo recibido durante este tiempo». «Tengo muchos sentimientos y palabras de agradecimiento a nuestra maravillosa afición y a los ciudadanos de nuestra ciudad. Me he sentido apoyado todo este tiempo». Asimismo, dio también las gracias «a los trabajadores del club, a los jugadores y al cuerpo técnico. Estoy muy agradecido a todo el equipo, los jugadores han hecho algo increíble».

El presidente del Marbella FC se definió como una persona trabajadora y humilde. «Nunca jamás en mi vida, ni en Rusia ni aquí en España, he incumplido las leyes y demostraré mi inocencia».

En lo deportivo dejó claro que no tiene ninguna intención de vender el club y que se mantiene firme con el objetivo que confesó en una de sus primeras entrevistas en España «ganar al Barcelona». Por ello, destacó que «aún no lo hemos hecho, así que seguiré trabajando y gestionando el club».

Asimismo, el presidente destacó que este equipo «es el mejor que hemos tenido en estos cinco años que estoy en el club» y se mostró muy ilusionado por seguir creciendo. «Hemos cometido algunos errores pero, tarde o temprano, la gente que trabaja mucho encuentra el buen camino».

El presidente blanquillo también lanzó un mensaje de tranquilidad al técnico Fernando Estévez con el que conversará en breve para tratar una posible renovación. Y es que Alexander Grinberg ya trabaja «pensando en el futuro y en la temporada que viene. Los problemas se quedan atrás».

Por supuesto ha sido a su familia, lo que más ha echado de menos durante esta ausencia. «Estaba preocupado por mi familia. Tenemos sueños por cumplir y caminamos todos juntos hacia ese sueño».