Borja Vivas está eufórico. Su excelente actuación el sábado en el Nacional de Pista Cubierta de Valencia le ha valido para recuperar la corona nacional de lanzamiento de peso, perdida en 2017, y también para liderar el ránking nacional, con una mejor marca de 20.27. El atleta atendió a La Opinión de Málaga para explicar sus sensaciones, tras colgarse otra vez el oro.

Octavo título nacional en lanzamiento de peso en pista cubierta. Se dice pronto, pero supongo que lograr ese récord no es nada fácil, ¿no?

La verdad es que parece como una obligación, pero cuando uno no lo gana, como me pasó el año pasado, lo echas en falta. Lo he disfrutado como si fuera el primero. Estoy muy feliz.

20.27 metros. Mejor marca nacional del año. ¿Se esperaba ese registro en esta cita nacional de Valencia?

Llegaba con muchas ganas. Mi entrenador me dijo que pasara de 20.30 y posiblemente eché en falta en algún lanzamiento que fuera un poquito más lejos. Me encontré muy bien y disfruté, que hacía mucho tiempo que eso no me pasaba.

Después de la medalla de plata del año pasado, ¿qué supone para Borja Vivas este oro?

Volver a sentirme que tengo opciones de hacer grandes cosas. También, quitarme los pensamientos negativos de cuando no te salen las cosas. Este año no voy a poder ir al Mundial y esta marca me supone afrontar el aire libre con toda la motivación posible.

Lanzó cinco veces por encima de 20 metros en el concurso de este fin de semana. ¿Está Borja Vivas en uno de sus mejores momentos a estas alturas de temporada?

Creo que sí. He tenido una pista cubierta muy cortita, solo dos pruebas antes del Campeonato de España. Me queda una Copa de Europa de lanzamientos el 10 de marzo y hay que ser positivos. Hacía tiempo que no me encontraba tan bien, tan regular. A veces haces un tiro bueno y luego otros peores, pero esta vez fueron todos regulares.

Ha estado en Valencia acompañado de muchos familiares. ¿Ha sido clave ese apoyo para sumar con tanta autoridad una nueva medalla nacional?

Sin duda. Sentirme arropado con mis padres, mujer, hermanos, cuñados, amigos, entrenador... Me he sentido como en casa. Con su apoyo ha sido más fácil. Los malagueños siempre se hacen notar y en la grada se les ha escuchado.

Con 33 años, ¿se considera ya un veterano del atletismo o está en la edad perfecta para seguir rompiendo barreras?

Quiero pensar que estoy en esa edad buena, pero lo cierto es que era uno de los cinco atletas más veteranos de este campeonato. Es verdad que a veces a la hora de entrenar ya se ve uno que le duelen cosas que antes no le dolían, pero en este campeonato he lanzado mejor que cuando era más joven. Al final, la edad es sólo un número.

Tiene ya la mínima asegurada para el Europeo al aire libre del próximo mes de agosto en Alemania. Los 20.80 de mínima para ir al Mundial de Birmingham, ¿son imposibles?

Este Nacional de Valencia era la última oportunidad. Solo queda la opción de la repesca, pero antes eran 32 participantes y ahora sólo van a ser 16. Ese cambio de formato no me favorece. En cualquier otra ocasión habría ido con mi marca. Para los JJOO de Río, por ejemplo, era 20.50, que ya subió medio metro respecto a Londres 2012. A ver qué inventan para Tokio 2020...

¿Cuáles son los grandes retos deportivos de Borja Vivas para este 2018?

Tengo la Copa de Europa de Portugal la segunda semana de marzo. Espero lograr medalla o estar muy cerca del podio. Este año, además del Europeo de Alemania, también hay Juegos del Mediterráneo, que son en Tarragona. Quiero prepararlos bien porque seguro que al ser en España tendrán mucho seguimiento.