Las posturas entre el Unicaja y Gustavo ´Panchi´ Barrera continúan acercándose, pero aún sigue sin haber un acuerdo cerrado. «Estamos en pleno proceso de negociación», expresó ayer el presidente del club, Francisco Molina. El agente del jugador también confirmó que los contactos existen, como adelantó La Opinión el pasado día 5, pero que las posturas están aún algo distantes: «Estamos estudiando la propuesta del club», señaló Ígor Crespo.

Lo cierto es que el Unicaja y Crespo llevan ya un par de semanas envueltos en unas negociaciones que, según las dos partes, podrían fructificar en breve. «Quizá a finales de semana pueda haber algo concreto y se pueda cerrar el fichaje», informó una fuente de la negociación.

Aún hay varios puntos en plena discusión. El más importante concierne a la duración del contrato. El Unicaja le ha propuesto a Panchi Barrera un acuerdo para la próxima temporada con una cláusula de renovación por otro curso más, que activaría la entidad cajista de manera unilateral. En el club confían en el potencial del base uruguayo de 1,92 metros, pero tampoco quieren hipotecarse con un jugador que es una petición expresa de Aíto García Reneses.

El técnico cajista ya lo tuvo bajo su mando en las categorías inferiores del DKV Joventut, cuando Panchi deslumbró al básket español proclamándose, junto a Rudy Fernández, campeón en el torneo júnior de Hospitalet. De hecho, Aíto le dio cobijo hace unos meses y le permitió entrenarse unas semanas con el equipo verde, una vez que el base había concluido la temporada con su antiguo equipo, el Trotamundos de Carabobo, de su Uruguay natal.

El agente del jugador exige dos años fijos y unas cantidades a las que el Unicaja sí está dispuesto a llegar. Crespo es socio del agente uruguayo del base, Óscar Moglia, que declaró hace 10 días en Uruguay que Gustavo Panchi Barrera iba a jugar la próxima temporada en la Liga ACB.

La lógica invita a pensar que el acuerdo se cerrará por una campaña, con opción a otra, como ya informara este periódico este pasado lunes, y que para compensar el deseo del jugador deberá aumentar su ficha, que será una de las más bajas del próximo plantel.

El base de 24 años tiene pasaporte español, por lo que ocupa plaza de comunitario, y se desplazó hace ya una semana a nuestro país, con la intención de agilizar la negociación. El jugador internacional llega tras haber firmado una buena temporada, algo que, como él ha admitido, hacía tiempo que necesitaba. Y es que desde que salió de Badalona no le ha acompañado la suerte. Pululó por varios equipos de LEB Oro, Ciudad de Huelva, Breogán y Melilla, e incluso LEB Plata, en el Pamesa Castellón. Volvió a su país natal, Uruguay, para ser una de las figuras de la competición en el Hebraica (donde fue subcampeón de Liga con 14.1 puntos y 6.9 asistencias) y más tarde en Atenas, donde llegó a semifinales en el 2008/09 (17 puntos y 9 asistencias por choque).

Esta temporada ha hecho otro gran curso en el Trotamundos de Carabobo, donde ha disputado 48 partidos, con una media de 33 minutos y 13,5 puntos y 18.3 de valoración. A sus 24 años, ésta puede ser su gran oportunidad.

Esperando a Rafa Martínez

Mientras, el Unicaja sigue a la espera de la respuesta de Rafa Martínez. Su agente, Miquel Solá, llega hoy de Estados Unidos y se espera que dé una contestación a la última contraoferta planteada por el Unicaja. En Los Guindos son muy optimistas respecto a su posible llegada, aunque habrá que negociar con el Valencia.