El Unicaja presentó ayer a Panchi Barrera como nuevo jugador para la próxima temporada con opción a otra más. El base uruguayo llega a Málaga con la papeleta de dar descanso al fichaje estrella del Unicaja este año, el americano Terrell McIntyre.

La presentación tuvo lugar ayer en la Residencia Andalucía, donde la Fundación Obra Social de Unicaja celebra todos los años su Campus de verano.

Como ya sucediera el año pasado con la presentación del pívot inglés Joel Freeland, más de un centenar de niños participantes en el campus adornaron con el color verde de sus camisetas la puesta de largo del nuevo director de juego cajista.

Las primeras palabras del jugador charrúa como nuevo jugador del combinado verde fueron de agradecimiento al club por su confianza. «Quiero agradecer al Unicaja y al presidente esta increíble bienvenida y espero que este año logremos algo grande».

Por su parte, el presidente Francisco de Paula Molina expresó que tiene mucha confianza puesta en el rendimiento del jugador uruguayo. «Aunque no es un jugador muy conocido para el público español, tiene mucho potencial y es una petición expresa del entrenador, por lo que tenemos mucha confianza depositada en él».

Panchi Barrera cree que la competencia por el puesto de base en el equipo malagueño va a ser muy dura aunque tiene claro que el titular va a ser McIntyre, que es la gran apuesta del club para esta temporada. «Por lo que he visto de McIntyre, es muy bueno y espero aprender mucho de él este año». Además, dice no conocer mucho al supuesto tercer base del equipo, el hispano-brasileño Rafa Freire. « No lo he visto jugar mucho pero si ha salido de la cantera de Unicaja es por algo y seguro que va a ser una dura competencia».

El uruguayo quiere olvidar el pasado en el que estaba considerado una de las grandes promesas del baloncesto europeo cuando compartía vestuario con una estrella del calibre de Rudy Fernández en el DKV Joventut hace ya 5 temporadas. «Tuve muchos problemas físicos y me costó volver a coger el ritmo, pero todo eso quedó atrás y ahora quiero demostrar que puedo jugar al mejor nivel.

En este sentido, el uruguayo no se agobia con la posibilidad de que éste sea su último tren para agarrarse a la elite del baloncesto europeo. «Me tomo este reto como una gran responsabilidad, pero lo que quiero es disfrutar el momento y rendir al máximo, primero por el equipo y después por uno mismo», dijo.

«Conozco muy bien lo que quiere Aíto, sé que le gusta jugar dinámico y defender duro, exactamente como me gusta a mí el baloncesto», explicó Barrera.

Además, el base uruguayo ya estuvo entrenándose con el Unicaja durante una semana el pasado mes de abril.

Para terminar el acto, los chavales del Campus tomaron la palabra y realizaron algunas preguntas al nuevo jugador cajista. «Mi base preferido de siempre y en el que más me he fijado es en Pablo Prigioni», contestó Barrera.