El Power Electronics Valencia quiere comprar en Málaga. Hace apenas unas semanas, el Unicaja ultimaba la llegada de Rafa Martínez. El tirador catalán parecía atado, pero le dio largas al club de Los Guindos y aceptó la propuesta de su equipo. Ahora el Valencia, en guerra con el Unicaja tras el affaire Saúl Blanco, está dispuesto a pescar en territorio verde. Desde la ciudad del Turia ya se han puesto en contacto con Guille Rubio para transmitirle que están dispuestos a ofrecerle un buen contrato de dos o tres años de duración para que deje, de manera inmediata, Málaga y haga las maletas en dirección a Valencia.

La insinuación taronja ha llamado la atención del ala-pívot del Unicaja, que tiene aún dos años más garantizados en la Costa del Sol. En Valencia ganaría algo menos de dinero, pero se podría garantizar una temporada más. Allí ayudaría a cumplimentar los famosos cupos.

A día de hoy, el cuadro levantino cuenta tan sólo con tres jugadores nacionales, cuando necesita un mínimo de cuatro para una plantilla de 11 hombres. El base José Simeón, el escolta Rafa Martínez y el alero Víctor Claver son los tres DNI que puede aportar, a día de hoy, el Power. Con Guille, íntimo amigo de Martínez, ya serían cuatro. Sustituiría a un ex cajista, Flo Pietrus. El francés se ha marchado de Valencia, al igual que el otro ala-pívot del pasado curso, Matt Nielsen (Olympiacos). El ex del Cajasol, Dusko Savanovic, sería el compañero de Rubio.

El Unicaja desconoce este movimiento, aunque no pondría demasiadas pegas a esta posible operación. A pesar de que el pasado año tuvo que indemnizar al Manresa y que firmó un acuerdo por tres cursos con Rubio, el técnico cajista, Aíto García Reneses, ya le transmitió hace tiempo a la dirección deportiva que urgía un cambio en el puesto de cuatro.

La hipotética marcha del jugador abriría un apasionante abanico de posibilidades dentro del club. El equipo, en primer lugar, se quedaría con cuatro españoles –Rafa Freire, Berni Rodríguez, Saúl Blanco y Carlos Jiménez–. Aíto podría incorporar a un quinto nacional tirando del Clínicas Rincón, como hizo ya el pasado curso, o bien acudiendo al mercado español para cubrir la vacante en la zona. Y ahí dos nombres destacan por encima de todos: Jordi Trías y Pablo Aguilar. Los dos tienen contrato en vigor, uno con el Barcelona y otro con el Madrid.

El catalán negocia en estos días su salida del club blaugrana, por lo que vendría gratis. Lo del joven ex del Granada costaría alrededor de medio millón de euros.

Pero es que el club puede permitirse incluso utilizar esa vacante en reforzar el perímetro con un segundo tirador. Con Martynas Gecevicius algo empantanado por las exigencias del Lietuvos Rytas, Jiménez podría pasar a ocupar el puesto de cuatro, donde tan buen rendimiento ha ofrecido, para permitir la llegada de otro francotirador que aproveche la lejanía este año de la línea de tres.