El entrenador del Unicaja explicó ayer que la derrota en la pista del Fuenlabrada supuso un «tropiezo inesperado», porque en la preparación del partido el equipo verde tenía «claro cómo ganar». «Sin perder balones, controlando el ritmo y ganando el partido siendo agresivos, en especial por dentro. No hemos conseguido nuestros objetivos. Ellos han estado muy bien en el perímetro, con un Barton increíble que nos ha hecho muchísimo daño. Defensivamente no ha sido nuestro partido y ahí ha estado la clave», expuso el preparador, que atendió a La Opinión desde la capital de España.

Los malagueños llegaron al último cuarto con la situación estabilizada, tras un intercambio de golpes que no benefició los intereses del cuadro cajista. «Cuando ganábamos por cinco puntos nos han hecho cuatro triples seguidos que nos han matado». A pesar de eso y del mal juego, el Unicaja tuvo una posesión con seis segundos para la conclusión. «Tuvimos nuestra opción de ganar o empatar el partido al final y no conseguimos anotar».

«Hemos metido 28 canastas de 2 puntos (10 más que ellos) y hemos ganado todos los apartados estadísticos: Tiros de dos, asistencias, rebotes, incluso la valoración, sólo que hemos tirado muchos menos tiros libres que ellos, pero hemos perdido en el marcador, lo importante. Tenemos que mejorar la semana que viene y no pensar que el partido con Murcia será fácil».