Por si no se habían enterado, yo se lo digo: esta tarde hay partido. Y contra el Caja Laboral, nada más y nada menos. Se lo comento por si alguien, entre altas, bajas, fichajes, reuniones del consejo y versos alejandrinos con rima consonante sobre Álex Abrines se había olvidado. O, directamente, ni se había percatado de que la Liga Endesa volvía este fin de semana y que el Unicaja jugaba en Vitoria.

No ha sido una semana más en Los Guindos. Ni mucho menos. Tras la enésima debacle del Unicaja, justo hace una semana, el domingo al mediodía ante el Asefa Estudiantes, se originó un tsunami que, al final, ha quedado en marejadilla tirando a calma chicha. Y es que de lo que en un principio ideó el club al resultado final hay un abismo. Chus Mateo estaba fuera del equipo el domingo por la noche. Pero cuando romper los dos contratos de su recambio, Svetislav Pesic, tanto en el Estrella Roja como en la selección alemana, fue imposible, el lunes al mediodía se dio marcha atrás.

Se optó por la línea tranquila y darle a Mateo, que tanto jugo le extrajo a esta plantilla en el primer tercio de curso, las herramientas necesarias para cambiar la situación. Que no era –y sigue siendo– otra que 14 derrotas en 15 partidos. Y el Unicaja se puso en manos del mercado. Con los riesgos que eso conlleva a mitad de marzo y con pocos recursos económicos que ofrecer. El baile de nombres comenzó con Krunoslav Simon siguió por Quincy Douby, Alan Anderson, Drew Nicholas... y terminó por un jugador de la LEB Oro, Troy DeVries, el máximo anotador de la categoría en el Melilla.

Y únicamente con él, tras mover cielo y tierra, comparecerá hoy el Unicaja como novedad en Vitoria. Con DeVries y sin Gerald Fitch, que se ha quedado en Málaga, dado ya de baja de la ACB y a expensas de ultimar su rescisión.

La pista del exTau no es la mejor para iniciar el despegue. El Unicaja no gana en Vitoria desde el 21 de junio de 2006. Y ya han pasado muchos años con derrotas en todas las competiciones posibles: Liga, Copa y Euroliga. Aquel triunfo le dio el título ACB al Unicaja de Sergio Scariolo (72-76). Y desde entonces sólo han caído decepciones.

Los de Dusko Ivanovic son terceros y, al igual que el Unicaja, siguen buscando un jugador que les dé brío en el mercado. Andrés Nocioni suena en Vitoria, ya que ayer quedó liberado de su franquicia. Con Lampe, ya recuperado, el Caja Laboral vuelve a dar miedo. Veremos si con DeVries es suficente. Porque los rivales verdes no perdonan. Valencia y Bilbao ganaron ayer.