Feliz debut para Luis Casimiro. El nuevo entrenador del Unicaja se alegró por cambiar las «caras de tristeza por sonrisas», pero advirtió que el camino es aún largo porque «hay que ser más ambiciosos, hay que mejorar y lo más difícil viene ahora: hay que llegar al play off», explicó. «No voy a vender humo, soy realista y quiero plasmar las cosas en el campo. Hemos hecho un buen entrenamiento esta semana. Pero eso sólo sirve si ganas. Si no, estás en casa, como me ha pasado a mí», espetó Casimiro en referencia a su última destitución en Valladolid.

El manchego fue cien por cien realista y en todo momento ofreció verdades como puños. «No eludo la responsabilidad, la asumo toda. Veo al equipo en el play off. Nos va a costar trabajo, claro. ¿Pero algo es fácil? No», se preguntó y respondió él mismo antes de señalar que con su plantilla de 14 jugadores deberá «hacer convocatorias, como Zeljko (Obradovic) en el Panathinaikos». «Pero más que un problema es un motivo para estimular y motivar».

Casimiro, en estos primeros momentos como técnico cajista y viendo el pozo en el que se encuentra el equipo, trata de ser positivo y sacar a la luz los hechos destacables. «El equipo estaba con ganas de cambiar la actitud. No voy a destacar nada negativo, sino solamente a ensalzar lo positivo. Lo necesita el equipo. Hay que ensalzar la actitud, la defensa y el rebote. Se ha ganado dando una buena cara, hemos tenido buena sintonía. Hay que trabajar aspectos defensivos y hemos sorprendido al Alicante en esa faceta. Debemos evolucionar», dijo. Se queda por eso con el trabajo atrás. «Ha sido un partido muy regular en defensa y esa actitud nos ha dado la posibilidad de ir siempre adelante en el marcador».