Txus Vidorreta, entrenador del Lucentum Alicante, considera que el fichaje de Luis Casimiro como entrenador del Unicaja servirá de «revulsivo» para el conjunto malagueño. Vidorreta opinó que la llegada de Luis Casimiro a Málaga servirá, al menos, para «despejar la mente de los jugadores, quitarles presión y obligarles a estar más concentrados», por lo que advirtió de la dificultad del partido para el Lucentum, por más que el Unicaja acumule una mala racha de resultados de 15 derrotas en los últimos 16 partidos.

«Sabemos que va a ser un partido complicado porque el Unicaja es un gran equipo y la llegada de Luis Casimiro va a ser un revulsivo para unos jugadores que están pasando por sus peores momentos», insistió.

Vidorreta explicó que el hecho de enfrentarse a un rival con entrenador nuevo también supone una dificultad añadida para preparar el partido y apuntó que tendrán que «incidir más en las características individuales» de los jugadores del Unicaja «que en el colectivo».

Resaltó también la calidad y la amplitud de la plantilla del Unicaja, más aún en comparación con la que tiene en el Lucentum. «El Unicaja tiene diecisiete jugadores, cuenta con la baja de Garbajosa y aún así va a tener que hacer dos descartes de jugadores norteamericanos», destacó el técnico, que recordó que él ha podido contar en las últimas semanas «con ocho jugadores mayores de dieciocho años y tres jugadores júnior».

«Cuentan con una plantilla de primerísimo nivel, con mucho donde elegir y a algunos jugadores que estaban pasando por un momento mental complicado puede ejercerles de revulsivo la llegada del nuevo entrenador», continuó Vidorreta, quien espera «un rival muy intenso».

Vidorreta también tuvo palabras para referirse a Abrines, el joven jugador del Unicaja que ha explotado en los últimos partidos. «Ha tenido un impacto importante en la competición. Que un jugador de dieciocho años anote 31 puntos en un partido de la ACB dice mucho de él», dijo.