Si hace usted una búsqueda de fotografías en «Google» y escribe las palabras clave (Berni Rodríguez Copa), entre las 10 primeras imágenes tendrá un montón del escolta malagueño y justo en la décima, el escudo del club –el antiguo, por cierto–. El Unicaja y Berni Rodríguez, tanto monta, monta tanto, ese matrimonio que parecía inseparable e incorrompible, pusieron ayer punto y final a su relación. Llegó el capitán con 8 años a Los Guindos, siguiendo los pasos de su padre. Y en el club de su ciudad ha jugado hasta ahora. Trece temporadas en el primer equipo, rompiendo todos los récords de fidelidad en el Unicaja y, por ende, en toda la Liga ACB. Pero el club anunció ayer que las dos partes decidían romper su convivencia. El Unicaja y Berni se dicen adiós. Por ahora de manera definitiva. Pero nunca se sabe en esto del baloncesto...

Tras una primera proposición rechazada justo tras concluir la competición, el pasado martes se produjo una nueva reunión en Los Guindos. Apremiaba el plazo, porque ayer expiraba el contrato del jugador verde, y el Unicaja debía indemnizarle con 125.000 euros por no prorrogar su compromiso para las dos siguientes campañas y con precios totalmente fuera de mercado, que superaban el medio millón de euros por curso.

Para romper ese compromiso y firmar un nuevo documento, el martes se planteó un nuevo escenario. El Unicaja y Berni acercaban posturas y anoche se vislumbraba un entendimiento para ayer sábado, para el día clave.

El club subió su oferta de un único año a uno garantizado más otro segundo opcional. Se daba un paso en firme hacia el entendimiento, ya que Berni tiene gasolina en sus piernas para aguantar como profesional al más alto nivel al menos dos campañas. A cambio, el «cinco» debía olvidarse de cobrar los 125.000 euros de indemnización, pero se le ofreció, eso sí, unas cifras muy atractivas para la siguiente campaña: 250.000 euros. Y a esa cantidad debía unirle una cláusula de ruptura de 100.000 euros más. En principio, todo hacía indicar que el trato era una realidad.

Sin embargo, en la mañana de ayer, justo en la fecha en la que expiraba el plazo de respuesta que la entidad le había dado al escolta, el cruce de llamadas no fue satisfactorio. El nuevo documento no colmó las expectativas creadas y Berni Rodríguez rechazó la segunda propuesta del Unicaja. Llegado a este punto, el Unicaja dio por cerrada la negociación y pasada la una y media del mediodía envió una nota de prensa en la que informó del final de una época.

Tampoco incluirá a Berni en el derecho de tanteo, la última maniobra que le quedaría al equipo. Y es que para hacerlo debería garantizarle un contrato con al menos el 60 por ciento de sus ganancias de este año. Y esa cifra se elevaría a 375.000 euros, que es más dinero del que se le ha ofrecido en este nuevo contrato. Así que desde hoy, las dos partes viven una nueva realidad.

Un mito

Con Bernardo Rodríguez Arias (7 de junio de 1980) se va el estandarte de un club que tiene su razón de ser en la cantera. Él mejor que nadie, y especialmente tras la marcha de Carlos Cabezas, ha representado el espíritu que se respira en Los Guindos. Él sabe perfectamente qué se siente al pasar por cada eslabón de la larga cadena de sentimientos y emociones, de sufrimientos y sinsabores, de infantiles hasta el primer equipo, categoría tras categoría, entrenamiento tras entrenamiento.

Llegó con 8 añitos y, tras pasar 13 en el Unicaja, se marcha con 32 años. Cuando hoy se levante de la cama vivirá la extraña sensación de no tener contrato en vigor. Mirará sus estadísticas, rememorará sus vivencias, echará mano de sus recuerdos en verde... y lo hará a partir de ahora en pasado.

Y siendo el capitán que ha levantado los tres grandes títulos que el club guarda en sus vitrinas como oro en paño: Copa Korac 2011, Copa del Rey 2005 y Liga ACB 2006. Desde que Bozidar Maljkovic le subió al primer equipo, tras el aterrizaje del serbio, Berni ha calado muy hondo. Compartió vivencias con Dani Romero, el último capitán del Unicaja. Y tras la marcha del otro «cinco», él asumió el rol de capitán por designación directa del propio «Boza». El balcánico ya vio algo muy grande en él en tan sólo su segunda campaña como profesional.

Década de gloria

Ha experimentado la gran época del actual Unicaja, una década dorada y gloriosa, que comenzó con un subcampeonato de Copa Korac en 2000 y la consecución al curso siguiente del otrora prestigioso título internacional, ya con él como comandante en jefe del vestuario en 2001. Se queda vacío ahora el santuario del Martín Carpena, huérfano de líderes y de hombres que sientan el escudo. Por rotación le toca a Joel Freeland. Aunque veremos si el inglés al final le toca el gordo de la NBA o debe seguir remando en galeras.

Berni volvió a rozar el éxito con el subcampeonato de Liga 2001/02, perdida ante el Tau, y al curso siguiente se logró el primer acceso al Top 16 de la Euroliga. En 2005 llegó la Copa de Zaragoza, otro título que levantó con sus brazos, así como la Liga ACB 2006, tras cobrar cumplida revancha ante el Tau. Y en 2007, otro hito: la Final Four de Atenas. Su última final, al igual que la del Unicaja, fue en la Copa de Madrid´09. Se perdió frente al Tau.

En todos estos escenarios ha estado presente el «capi», siempre como actor principal. Querido por la grada del Martín Carpena, respetado por la profesión, Berni incluso ha formado parte de la directiva de la ABP –el sindicato de jugadores–. Internacional español ha sido también clave en «La Roja»: subcampeón olímpico en Pekín´08, subcampeón en el Eurobasket´07 y campeón del Mundo en Japón´06.

Berni, el inseparable de Jorge Garbajosa y Carlos Jiménez en estos últimos años, siempre será una parte indiscutible del club. Quizá sea sólo un hasta luego. Queda verano. Mucho verano...