Acaba de cumplir los 27 años (Zagreb, 24 de junio de 1985), es escolta internacional en la selección croata, ha finalizado el 30 de junio su vinculación con el club de toda su vida, el KK Zagreb y, tras una campaña que se vio cortada en plena eclosión por las lesiones, va a convertirse en el primer pilar del nuevo proyecto del Unicaja 2012/13. Krunoslav Simon, jugador de perímetro muy polivalente, firmará de manera inminente un contrato por la próxima temporada más otra opcional, y se convertirá en el, hasta el momento, único fichaje cajista.

Las posturas están francamente cercanas y el director deportivo del club, Manolo Rubia, confía en cerrar la operación en tan sólo unas horas. Los contactos con su agente en España, Arturo Ortega, son continuos y el club podría dar oficialidad al acuerdo de un momento a otro.

No hubo que comenzar la negociación por un punto inicial, ya que Simon estuvo virtualmente fichado a mediados del mes de febrero de este mismo año. En plena crisis de resultados del equipo, Chus Mateo pidió a gritos un refuerzo, un golpe de efecto para variar una dinámica que, ya lo veía el preparador madrileño, podía minimizar todo lo mucho y muy bueno hecho durante el primer tramo de campeonato.

Y la negociación desembocó en un acuerdo que, cuando iba a ser rubricado, se frenó en seco. No hubo luz verde por la cúpula de la entidad y, cuando el chico ya tenía las maletas hechas y el billete de avión en el bolsillo, se quedó en casa. Acabó la temporada, entre lesiones, en el KK Zagreb, y el pasado 30 de junio finalizó su contrato. Ahora está libre y siempre ha ocupado un hueco en la agenda de la dirección deportiva para reforzar el equipo.

Nando de Colo, la primera opción para el puesto de combo guard, se evaporó por sus elevadísimas exigencias económicas y por su deseo de jugar en los San Antonio Spurs de la NBA. Luego se habló, largo y tendido, con Jamont Gordon, una vez que el CSKA le dio la carta de libertad. Ni siquiera se realizó una oferta por el americano, ya que al escuchar las pretensiones económicas del jugador (1,3 millones), alguno hasta se cayó de la silla en Los Guindos. Se esperó, prudencialmente, porque Gordon encajaba en el puzle de Jasmin Repesa. Un jugador de primer nivel, con caché y currículum, muy completo en defensa y ataque. Pero ha sido el propio entrenador el que ha dado vía libre a la contratación de su compatriota Simon.

Repesa ha hablado personalmente con el escolta de 1,97 metros. Y de esa conversación salió tan convencido el técnico cajista y seleccionador croata que dio luz verde a su fichaje. A Repesa le gusta, especialmente, la polivalencia de Simon, capaz de subir el balón, tirar de tres y penetrar e incluso defender a aleros. Su zurda, sin ser mortífera, es más que aceptable. Puede generarse sus propios tiros y no es egoísta. Tiene muchas virtudes. Y también alguna pega.

A sus 27 años, ésta será su primera experiencia fuera del baloncesto croata. Y ya sabemos que el salto a la ACB siempre impresiona. A alguno le causa hasta vértigo. Simon tiene problemas de lesiones, es dado a coger algún kilo de más y la defensa no es, ni mucho menos, su fuerte. Repesa está convencido de poder tapar sus defectos reduciéndole minutos de rotación para transformarlo en intensidad. El chico ha captado el mensaje y lleva todo el verano trabajando con un entrenador personal para empezar el Preeuropeo con Croacia al cien por cien.

La «marea verde» le conoce bien. El Unicaja jugó ante el KK Zagreb en la Fase Regular de la Euroliga esta campaña. Simon firmó en Málaga 10 puntos y en Zagreb se fue hasta los 16.

El primer movimiento serio del Unicaja está a punto de fructificar. A la ayuda de Repesa, Simon sumará la de Luka Zoric, íntimo amigo suyo. Eso, sin duda, le facilitará su adaptación.

Ahora el club debe seguir apuntalando el equipo. El acuerdo con Sergi Vidal está cerrado, a falta de ver qué sucede con los derechos que tiene sobre él el Lagun Aro, que puede acudir al tanteo. Con Txemi Urtasun se negocia, sin avances significativos. Los tres son jugadores de equipo. Fundamentales en la construcción de un proyecto. Pero faltan los «artistas». Ahora urge contratar a un par de electricistas, un base un jugador exterior que las «enchufen». Y deben ser de primerísimo nivel.