El último episodio del único culebrón de la plácida e ilusionante pretemporada cajista tendrá su desenlace el próximo lunes. Para este día se ha fijado una reunión entre la cúpula del Unicaja y Sergi Vidal para decidir si el alero catalán pasa por el quirófano para solucionar la osteopatía de pubis que sufre desde su llegada al club de Los Guindos. En esta cumbre para tratar la mejor solución respecto a la lesión del jugador estarán presentes, además del propio Vidal; el presidente, Eduardo García; el entrenador, Jasmin Repesa; el director deportivo, Manolo Rubia; el agente del jugador, Ernest Berenguer y los doctores Carlos Salas y José Nogales.

Antes, durante el día de hoy y el de mañana Vidal se probará junto al resto de sus compañeros en el Palacio de los deportes José María Martín Carpena a las órdenes todavía del segundo coach Curro Segura. Buena parte de la decisión final que se tome en la reunión del lunes vendrá supeditada por las sensaciones del jugador durante los entrenamientos a pleno rendimiento.

En un principio, parece que la intervención quirúrgica sigue siendo la alternativa más lógica, ya que se evitaría así una posible recaída si sigue decantándose por el tratamiento conservador, que es el que está llevando a cabo Vidal durante estas semanas junto a los fisioterapeutas del club verde.

Por ello, aunque la recomendación de los doctores es la operación, la última decisión se tomará en función de si persiste el dolor en la zona afectada. Pese a que tanto el jugador como el club quieren apurar al máximo todas las opciones, ya han contactado con varios especialistas por si definitivamente no hay más remedio que realizar la intervención. Se trata de una operación relativamente sencilla, según los especialistas, en la que las técnicas empleadas han evolucionado mucho y apenas es invasiva. Con ello, Vidal si finalmente se opera, a las dos semanas estará realizando carrera continua y podría volver a las canchas de juego en dos meses, por lo que se perdería el arranque de la Liga Endesa.

Pese a todo, la intención del propio Vidal es la de evitar el quirófano a toda costa, por ello continúa trabajando a destajo con los fisios cajistas antes de saltar hoy a la cancha junto a sus compañeros para evaluar el estado de sus molestias. Repesa ha seguido muy atento desde la concentración croata la evolución del estado de salud del alero catalán.