Zoran Dragic sufrió ayer durante el entrenamiento un fuerte esguince en su tobillo que le impedirá jugar esta noche ante el Alba de Berlín. El jugador esloveno ha pasado hoy por la Clínica Martí Torres para conocer el alcance de la lesión. Las pruebas médicas que le han realizado al alero revelan que la lesión es peor de lo que se esperaba y podría ser baja para los próximos 2-3 meses.
No obstante, Dragic y el Unicaja deberán sopesar cuál es tratamiento a seguir. Optar por un tratamiento conservador, que permitiría su regreso para los playoffs; o pasar por quirófano, con lo que diría adiós a la temporada. La primera opción tiene sus problemas, ya que el riesgo de recaída es alto. Por contra, si se opera, no podrá a jugar esta temporada. Dragic tendrá que tomar una decisión con la mirada puesta en septiembre, cuando Eslovenia acogerá el Eurobasket.
