Joan Plaza realiza este fin de semana una visita exprés a Málaga para participar en el clínic que la Fundación Cesare Scariolo organiza en la capital y ayer, antes de comenzar una de sus dos charlas programadas, atendió a los medios escritos para hacer una valoración de sus primeros días como entrenador cajista. Y no eludió hablar sobre Marcus Williams, cuyo «despedido» no considera que afecte a la ilusión de los aficionados.
«Williams es un jugador muy bueno. Si juega contra nosotros seguro que nos destroza, eso está claro, pero, ¿estaba el pabellón lleno con él en la plantilla? Se requieren más cosas, no de un jugador en particular, sino del equipo. No debemos buscar la inmediatez de que éste nos va a traer 10 socios más, lo que va a arrastrar más gente al pabellón es que ganemos y que nos dejemos la piel en el campo y si encima hacemos chiribitas, fantástico, pero la prioridad tiene que ser el equipo».
Por contra, se deshizo en elogios con el lituano Mindaugas Kuzminskas, nuevo fichaje cajista y que ya lo tuvo en las filas del Zalgiris. «De él está todo dicho. Ahora sólo queda verlo jugar. Yo no soy objetivo. Es una persona que va a ilusionar al Carpena. Es un chico de corte muy humilde, muy trabajador, muy serio... Es que es hasta guapo el cabrón (risas). Reúne una serie de condiciones de jugador hambriento. Además valora la ACB y al Unicaja, sabe donde viene, el límite lo va a poner él y tiene un campo de mejora exponencial».
En cuanto a Jayson Granger, prioridad del club para completar la pareja de bases junto a Earl Calloway, Plaza valora que el Unicaja sea la primera opción del jugador uruguayo. «Estamos debatiendo, y es lo que a mí me gusta. Cuando era ayudante no me gustaba que me dieran la razón y ahora no quiero ayudantes que me la den a mí porque sí. Me gusta que nos sentemos y que aquello, sin ser la oficina del doctor House, sí que haya debate. Y en eso estamos, mirando que es lo mejor o lo más conveniente como pareja de Calloway o en otras posiciones; por las limitaciones de cupos o porque miremos al futuro. Hay muchos condicionantes a tener en cuenta. Granger ha declarado sus ganas de venir que es algo fundamental para mí».
De momento, las primeras semanas como entrenador cajista las ensalza como muy positivas. «Veo gente muy ilusionada, veo gente muy predispuesta, que está muy encima, que no respeta que he estado 11 meses fuera de casa (bromea). En el club todos tenemos ganas de hacer las cosas bien y aquí todo el mundo ha de involucrarse: nosotros, prensa, público... Yo voy a intentar dar otra orientación al equipo, que va a ser serio, plástico, con el que la gente se va a divertir, pero todo esto requiere muchos ítems y desde la gente de oficinas hasta la señora de la limpieza tenemos que contribuir para que el ambiente sea cada vez mejor».
Para lograrlo, el catalán considera estos meses de planificación fundamentales. «Es muy importante. Luego tú puedes gestionar mejor o peor la plantilla pero si la plantilla cojea de algún aspecto lo vas a pagar todo el año. Por eso es fundamental ahora tener paciencia. Se tiene tendencia a quedarse con la primera casa que te enseñan y normalmente la cuarta o la quinta es mejor. Tenemos muy poco margen de error para intentar no cambiar ningún jugador durante la temporada y para ello tenemos que tener un punto de espera. Dentro de unas semanas hay jugadores que van a abaratarse, que van a valorar nuestro proyecto, pero sí que es fundamental que ahora no nos equivoquemos».
El hecho de tener prácticamente la plantilla cerrada a falta de dos o tres retoques, Plaza cree que le viene bien al equipo. «Es importante mantener estructuras. Los cambios radicales hay que evitarlos... Los Bulls necesitaron seis años para ganar el primer anillo y eso es porque todo requiere un proceso. Intentar cambiar lo menos posible es lo ideal pero también es cierto que hemos tenido que hacer algún sacrificio para tener un equipo que te dé garantías. Hay que jugar las cartas que tenemos y procurar no equivocarnos en ningún fichaje».
En cuanto a la cantera, plaza cree que el Unicaja debe definir su política. «He hablado estos días con los jefes y el club debe tener una línea de trabajo que yo ahora puedo sugerir, ha de definirse, ha de saber si va a poder mantener este ritmo en el que ahora apenas hay jugadores de la cantera o quiere lo contrario. Lo que no se puede jugar es con dos barajas al mismo tiempo. Yo soy una persona que soy capaz de encontrar minutos para los jóvenes, pero también está muy bien la fórmula que se empleó con Kuzmic en su cesión».
Por último, Plaza aseguró que no va a planificar la primera parte de la temporada para llegar a tope a la Copa del Rey 2014, que se celebrará en Málaga. «Quiero estar en la Copa por méritos propios y si puedo ser cuarto mejor que ser quinto. Hemos de tener los pies en el suelo y saber que llevamos años no jugándola o eliminándonos muy pronto. Lo importante es dar buenas sensaciones desde el principio y ofrecer una imagen de equipo sólido y si lo logramos nuestra clasificación no va a depender de que se juegue en Málaga o en Valladolid», finalizó el entrenador cajista.
